RT.- Israel ha lanzado una de sus mayores ofensivas en Siria, atacando más de 250 objetivos, incluyendo bases militares, defensas aéreas y almacenes. Además, se ha desplazado más allá de los Altos del Golán, consolidando su control sobre puntos estratégicos como el Monte Hermón.
El gobierno de Benjamin Netanyahu considera que estos avances debilitan a Irán y a su aliado Hezbolá, generando una posible ventana para un ataque preventivo. Sin embargo esto podría empujar a Teherán a acelerar su programa atómico.
Mientras Teherán insiste en que su programa nuclear es pacífico, Israel teme que su aislamiento en la región impulse una carrera atómica. La situación, marcada por tensiones crecientes, refuerza la posibilidad de un enfrentamiento directo en un escenario altamente volátil.