“El extranjero y los dos bolivianos están siendo procesado por el delito de tráfico de sustancias controladas toda vez que fueron identificados por los pobladores del lugar, como el piloto del helicóptero siniestrado y sus dos ayudantes. Una vez que se tomó conocimiento del hecho desplazamos de manera inmediata al fiscal de materia y en el lugar del hecho se realizó el rastrillaje dónde se logró encontrar la sustancia controlada que los sujetos habrían intentado ocultar”, dijo Mariaca.
Por su parte, el fiscal asignado al caso, Meison Mamani, informó que el hecho se conoció el 4 de mayo de 2022 a horas 22:45, aproximadamente, cuando agentes policiales de la Unidad Móvil de Patrulla Rural (Umopar) Oriente, llagaron hasta la zona de la comunidad Campamento en cercanías de la estancia Caparú, donde los encargados del lugar informaron al personal policial que una persona de nacionalidad extranjera pidió ayuda después de sufrir un accidente aéreo con el helicóptero que pilotaba y horas más tarde dos personas fueron a ayudarlo.
El hecho fue puesto a conocimiento del Ministerio Público y junto al personal policial llegaron hasta el lugar donde se encontraba el helicóptero siniestrado.
Luego de un rastrillaje, se encontró cinco bolsas de yute que contenían paquetes tipo ladrillo que fueron escondidos a 30 metros de la aeronave siniestrada, por ello se procedió a la aprehensión del piloto y las dos personas que llegaron a ayudarlo.
Las bolsas fueron trasladadas hasta dependencias de Umopar en el municipio de San Ignacio donde el fiscal de materia y la Policía realizaron la prueba de campo que dio positivo a cocaína en un peso total de 249 kilos.