Tras la muerte de Marco Antonio Aramayo, exdirector del Fondo Indígena, que cargó 256 procesos que “no fueron demostrados” y pasó de ser denunciante a denunciado, profesionales acusan a la justicia como responsable por su falta de independencia y sometimiento al poder Ejecutivo.
“Aramayo fue un un hombre valiente, consecuente con sus principios, noble de corazón y un emblema de una lucha permanente contra la corrupción. Lamentablemente el poder de la corrupción fue más fuerte que su corazón que no resistió, porque estaba más de siete años como detenido preventivo, más de 120 procesos que no fueron demostrados y no tuvieron sustento alguno en la administración de la justicia, en diferentes departamentos, diferentes provincias que los diferentes directores del Fondo Indígena le aperturaron”, advirtió el abogado Eusebio Vera, que patrocinó en algún momento a Aramayo, en contacto con EL DIARIO.
En criterio de Vera, este caso debe servir como punto final y de partida, para que el ministro de Justicia, Iván Lima, “haga su trabajo y planifique líneas de cambio estructural dentro de la administración de justicia”.
“La justicia ya no puede estar sometida al Órgano Ejecutivo, y el primer ciudadano que tiene la obligación de aquello es el ministro Iván Lima. La justicia debe volver a lo que fue antes, una justicia imparcial, proba, con elementos y principios fundamentales para un estado constitucional de derecho, porque una sociedad sin justicia imparcial, es una sociedad con cáncer”, advirtió.
El investigador senior de la Human Rights Watch (HRW), César Muñoz, dijo que «la muerte de Aramayo con denuncias de violación al debido proceso evidencia los “estragos” de la falta de una justicia independiente».
“Bolivia: Nos entristece la muerte de Marco Aramayo. Hay alegaciones serias de violación al debido proceso e inadecuada atención médica en prisión. ¿Pero quién va a investigarlas? De nuevo se evidencian los estragos de la falta de una justicia independiente”, escribió Muñoz en su cuenta de Twitter.
Asimismo, el ministro de Justicia, Iván Lima, en entrevista con el canal del Estado dijo que “hay una justicia que no ha sido humana, que no ha tomado las medidas necesarias para preservar en primer lugar la vida y la salud de este exfuncionario de Estado”.
“No es admisible que una persona tenga que vivir la situación que ha vivido el señor Aramayo y su familia, nuevamente es un momento de reflexión y de empezar a poner soluciones”, manifestó.
El abogado y exalcalde de La Paz, Juan del Granado, advirtió que Aramayo murió en manos de una “justicia infame sometida al poder político”, que encarcela a inocentes y deja impunes a poderosos.
“Basta ya, ¡Impulsemos la reforma para acabar con los asesinatos judiciales y garantizar la vida, la libertad y la dignidad de todos!”, escribió Del Granado en sus redes sociales.
El abogado Israel Quino cuestionó el sometimiento de la justicia al poder político de turno.
“Otra víctima más del lapidario e indolente Sistema Judicial boliviano funcional al poder político de turno. Ya no más reformas sino reestructuración judicial. La población sale a protestar en las calles porque el gobernante hace poco o nada por concertar y cambiar desde el poder”, dijo.
ARAMAYO
Marco Aramayo fue designado como director del Fondo de Desarrollo para los Pueblos Indígenas Originarios y Comunidades Campesinas (Fondioc), posesionado por el entonces ministro de Economía, Luis Arce, cargo que ejerció entre 2013 a 2015, cuando denunció irregularidades en el manejo de los recursos públicos asignados a los proyectos del área rural del país.
Aramayo pasó de denunciante ha denunciado y sumó 259 acusaciones, 86 medidas cautelares, ocho juicios abiertos y dos sentencias.
Las acusaciones en su mayoría repitieron las figuras de “incumplimiento de deberes, conducta antieconómica y contratos lesivos al Estado”, que incluso se fueron desdoblando según cada región y departamento donde hubo algún proyecto del Fondioc.
La primera denuncia de Aramayo apuntó a la entonces ministra de Desarrollo Rural, Nemesia Achacollo, que además, por Decreto Supremo 28571, era presidenta del Directorio del Fondioc. Según su testimonio, la dirigente masista había aprobado un desembolso por Bs 575 millones en plena campaña electoral de 2014.
Otra alerta se dio por los pedidos “personales” de la dirigente Juanita Ancieta para obtener recursos destinados a la posesión de Morales en Tiwanaku en enero de 2015. En diciembre, Aramayo alertó que había un posible desfalco que, con el pasar de los meses, llegó al equivalente de 170 millones de dólares, el mayor escándalo para el régimen de Evo Morales.
Ese año Aramayo fue aprehendido y luego detenido en la cárcel de Cobija, desde entonces su calidad de detenido preventivo se extendió por siete tortuosos años.
“Comenzaron con un caso y 153 juicios, la interventora Larisa Fuentes se inventó 86 y Eugenio Rojas, 20. Total: 259 juicios. Hicieron avanzar 86 procesos; de ese total, sufrí 27 cautelares. Avanzaron un juicio en Tarija, uno en Santa Cruz, tres en Oruro, dos en Cobija, el resto está paralizado”, declaraba Aramayo en 2019.
La Fiscalía General con base a informes de la Contraloría, abrió la investigación sobre 153 proyectos del Fondioc que no fueron ejecutados o que presentaron desembolsos irregulares entre 2010 y octubre de 2014. El Directorio, los directores ejecutivos y los beneficiarios debían entrar en el proceso, pero solo Aramayo arrastró la pena mayor.
LA MUERTE
El pasado 14 de abril, Marco Antonio Aramayo fue internado en el Hospital de Clínicas con un cuadro de insuficiencia respiratoria, paro cardíaco y posterior daño neurológico. El fin de semana ingresó en coma diabético y fue derivado al hospital municipal de Cotahuma.
Ayer, el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz informó que Aramayo, falleció a las 5:40 horas por un “paro cardiorrespiratorio secundario a todas las enfermedades que presentaba el paciente”.
“A horas 5:00 aproximadamente ha sufrido un segundo paro cardiorrespiratorio, se han seguido los protocolos y medidas de reanimación y el paciente falleció a horas 5:40 de la madrugada”, precisó la directora del hospital municipal, Elba Espejo.
La autoridad municipal explicó que tras su llegada al nosocomio municipal, fue internado en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI), ya que en el Hospital de Clínicas se encontraba en el área de emergencias por la falta de espacio en esa área.
Allí fue intubado y recibió la atención médica. Se efectuaron las evaluaciones médicas en cardiología, nefrología, medicina interna y en terapia intensiva, ya que el paciente ingresó con un cuadro crítico, remarcó la funcionaria.
Aramayo fue velado en una funeraria de la ciudad de La Paz y por la noche fue trasladado a su natal Santa Cruz. (EL DIARIO y Visor21)