De acuerdo con los resultados de la evaluación psiquiátrica, donde se revela una depresión profunda, el médico de cabecera de la expresidenta, Fernando Pabel, manifestó que Jeanine Añez requiere de atención especializada.
“Yo me remito al texto base que manejan los psiquiatras, que contiene diagnósticos y tratamientos de pacientes a escala internacional, la misma que dice que una depresión mayor debe ser internado en un centro psiquiátrico con condiciones adecuadas”, afirmó el médico en contacto con Asuntos Centrales.
Los médicos de emergencia cerraron con cuatro puntos una herida en el brazo izquierdo provocada por la expresidenta Jeanine Añez que en la madrugada del sábado 21 de agosto intentó quitarse la vida por un cuadro depresivo agravado por sucesivos rechazos a su pedido de libertad y la amenaza de proceso contra su hija.
“Después de la junta médica (realizada el pasado jueves), a solicitud del abogado me constituí en el penal para evaluarla y ver su estado general. Note que en ese momento ya habían sido suturadas sus heridas, estaba estable, pero su estado de ánimo era realmente malo. Su estado sicológico era totalmente alterado. Solicité una evaluación con el psiquiatra con el fin de actualizar su evaluación y trasladarla a un centro psiquiátrico con las condiciones con el diagnóstico de depresión mayor”, explicó.
MÁS EXÁMENES
La mañana de ayer, la expresidenta fue trasladada al centro de salud Unimed para someterse a exámenes médicos complementarios.
“Este es un estudio neurofisiológico; simplemente, se va a ver si los nervios y los músculos están funcionando adecuadamente, eso es todo”, detalló la doctora Mónica Molina, a la agencia estatal ABI.
Unas horas antes, a través de sus redes sociales, familiares de la exdignataria publicaron un mensaje afirmando que la exautoridad se encuentra “angustiada” porque desconoce “qué le van a hacer”.
“Jeanine Añez está muy débil. Sufre de forma permanente. Cada 10 minutos ingresa alguien a su celda a espiar, a preguntar o no se sabe a qué. Vive en alerta, angustiada, sin descanso porque desconoce qué le van a hacer: si sedarla, envenenarla o trasladarla sin rumbo conocido”, consta
Las palabras fueron acompañadas de una cita adjudicada a la expresidenta: “Ya no quiero vivir. Mis hijos necesitan hacer su vida. Ya no quiero más medicamentos que no sé cuáles son. Pido por favor a mis carceleros que me digan qué estoy tomando”.
La salud de la expresidenta es tema de debate internacional, tras reiteradas denuncias de su familia y personalidades públicas, debido a que la expresidenta es hipertensa y presenta un cuadro de depresión.
En las últimas semanas fue trasladada a diferentes centros de salud por orden de Régimen Penitenciario para que médicos le realicen exámenes. Su familia, sin embargo, denunció que no fue sometida a pruebas rigurosas y que ese ritmo de traslados afecta su salud.
“CONTRAINDICADO”
Por otro lado, un psiquiatra que participó de la junta médica, manifestó que el fármaco que era administrado en el Centro de Orientación Femenina de Miraflores a la expresidenta Jeanine Añez para tratar su cuadro de ansiedad, era “contraindicado”, informaron el pasado lunes los abogados que patrocinan a la exmandataria.
Alain Canedo, uno de los abogados que patrocina a la exdignataria, confirmó que en la reunión que se realizó el pasado jueves entre médicos, psiquiatras y personal de Régimen Penitenciario, hubo voces que cuestionaron la medicación recetada a su cliente.
“Ella tiene un mal del corazón en un ventrículo, una falla en el ventrículo izquierdo. Pero lo que más nos llamó la atención fue que habló un psiquiatra del Estado, señalando que básicamente la receta de medicamentos era contraindicada respecto al Alprazolam. Es contraindicado en su tratamiento, puesto que esto le produciría síndrome de pánico”, manifestó.
En la última audiencia de acción de libertad que se cumplió de manera virtual, el pasado jueves, Añez imploró por una detención domiciliaria y denunció que su estado de salud, tensión y depresión estaba al límite.