Los ex jefes militares, Jorge Terceros y Gonzalo Jarjury, acusados por el caso denominado golpe II, aseguran que son procesados por hechos del que no participaron y lamentan que no se haya iniciado una investigación contra el responsable. Ofrecen como testigo de descargo al exministro de Defensa, Javier Zabaleta, según memorial al que tuvo acceso EL DIARIO.
“De manera sorpresiva fui notificado personalmente con resolución de acusación formal en el que se me atribuye que habría cooperado a la señora (Jeanine) Añez en su traslado (…). Nunca trasladé y menos ordené situaciones similares, además los comandantes de fuerza, no somos parte del Comando en Jefe”, se lee en un memorial presentado por el excomandante de la Armada Boliviana, Gonzalo Jarjury, a la que se sumó el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), Jorge Terceros.
CONTEXTO ERRÓNEO
Asimismo, aclaran que los fiscales sostienen de “manera errónea” que miembros de las Fuerzas Armadas (FFAA) procedieron al retiro de la medalla presidencial del Banco Central de Bolivia y que, con ello, presuntamente incumplieron sus funciones y atribuciones de defender y conservar la independencia, seguridad y estabilidad del Estado a través del resguardo del Gobierno legalmente electo.
“Mediante memorial presentado en fecha 22 de noviembre de 2021, se proporcionó el nombre del verdadero autor de esos hechos (exjefe de la Casa Militar) cuyo memorial no tuvo respuesta alguna, por lo que en fecha 29 de noviembre de 2021 se reiteró la petición, empero, no se nos dio curso en contraposición del principio de objetividad, ya que cursan informes en ese sentido en el cuaderno de investigaciones”, lamentan.
Asimismo, refieren que los fiscales señalan que producto del comunicado de fecha 11 de noviembre de 2019, se tendría plenamente establecido coordinación entre las FFAA y la Policía y que ya estaba en marcha desde antes de la conferencia, desde la llegada de Jeanine Añez al aeropuerto de El Alto.
“Esa conclusión es ridícula, ya que todos deben recordar que el general (William) Kaliman la trató mal (a Añez) en una llamada telefónica, señalándole: ‘usted me va a dar órdenes cuando sea presidente, la colgó y apagó el teléfono’, decir también que Kaliman no quiso sacar a las FFAA (hasta el último momento) hasta asegurarse que Evo Morales se encuentre en espacio aéreo, además, nunca conocí a esa señora Añez, hasta el momento que por mis principios y valores militares decidí poner a disposición mi cargo a la señora Añez la noche (23.30) del día 12 de noviembre de 2019, por lealtad al gobierno legalmente establecido de Evo Morales”, recuerda Jarjury.
Según el memorial, los fiscales refieren que Jarjury presuntamente avaló la investidura e imposición de símbolos patrios a Añez, sin competencia y fuera de la Asamblea Legislativa.
“¿Cómo avalé?, ¿y cómo es que acepté?, y ¿cuándo concreté la imposición de símbolos patrios?, cuando la ejecución de esos actos tienen nombre y apellido y están claramente identificados y deberían haber estado en estas investigaciones, ¿por qué no están?, ¿por qué no está acusado el general Miltón Navia?, ¿por qué no está acusado el Tcnel. Rolando Gallardo y el Cap. Frag. Amilcar Rioja?, quienes acomodaron los símbolos patrios a la señora Añez. ¿Los fiscales se parcializaron con ellos, o qué pretenden los fiscales? Los fiscales están beneficiando a quienes realmente cometieron los delitos por los cuales nos acusan. ¿Por qué ese accionar de la Fiscalía?”, cuestionó.
ACUSACIÓN SIN
ELEMENTOS
En ese marco, a través del documento aseguran tener una acusación sin elemento probatorio alguno, solo “simples” conjeturas.
“Son simples conjeturas, son apreciaciones subjetivas, empleando de manera equivocada términos militares y normativa militar; por ello, en juicio enervaremos y desvirtuaremos los hechos que se me acusan de manera falaz, causándome enormes perjuicios, ya que estoy sometido a una investigación en el que mi accionar no tuvo ninguna relación con los hechos que se me acusa”, se lee en otra parte del memorial.
Aclaran que los elementos de prueba cursantes en el cuaderno de investigaciones, ninguno tiene relación con sus personas, ya que todos los documentos hacen relación a hechos realizados o sucedidos en la Asamblea Legislativa, con cuyo órgano no tenían ni tienen relación.
Asimismo, recuerdan que de acuerdo con la Ley de Organización del Poder Ejecutivo (LOPE), reglamentada por el Decreto Supremo 24855 y el Manual de Funciones del Ministerio de la Presidencia, el responsable de la seguridad y parte de la estructura de apoyo al Presidente, responsable de las personas e instalaciones del Palacio de Gobierno y la Casa Civil (Residencia Presidencial) era el Jefe de la Casa Militar, en ese entonces, teniendo bajo su responsabilidad operativa al Regimiento Escolta Presidencial “Colorados de Bolivia” y de manera directa a la Unidad de Seguridad para altos Dignatarios de Estado (USDE) y a la Unidad de Edecanes. Demostrándose con ello, que los señores fiscales están completamente equivocados al referirse que los Comandantes de las diferentes Fuerzas o personal de las FFAA cercaron la Plaza Murillo, eso nunca pasó”, dicen.
ZAVALETA
Asimismo, recordaron que el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, estuvo al mando de las FFAA todo el día 10 de noviembre con el Alto Mando cuando se dio la renuncia de Evo Morales en el Comando.
“Hasta finalizar el día 11 de noviembre de 2019, estábamos cumpliendo sus deberes, es decir 30 horas después de la renuncia de Evo Morales, consecuentemente, todos estuvimos bajo su mando, mucho tiempo después de que el señor Evo Morales haya renunciado e inclusive haya abordado el avión que le trasladó hasta la ciudad de México; cumpliendo de manera estricta el Art. 22 inciso a) de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas y el Art. 39 del Decreto Supremo N° 29894, que reglamenta la Ley de Organización del Poder Ejecutivo (LOPE)”, aclaran.