El juez del Juzgado Tercero Anticorrupción, Roberto Parada, determinó ayer enviar con detención preventiva al penal de Palmasola de Santa Cruz de la Sierra, por 180 días, a Julio César Herbas Aguilera, uno de los involucrados en el caso de presuntos ítems fantasma.
“Se determina la detención preventiva por el plazo de 180 días, desde el día de hoy 12 de diciembre de 2021 hasta el 10 de junio del 2022. En ese entendido, se ordena por secretaría se libre el mandamiento de detención preventiva dirigido al director de centro de orientación Palmasola en Santa Cruz”, dictaminó la autoridad judicial.
El exfuncionario municipal, es uno de los siete procesados en este caso y el primero que se presentó en calidad de denunciado para brindar su testimonio.
“No tengo nada que esconder. Voy a colaborar a la justicia, ya ustedes se van a enterar de lo que voy a decir”, fueron las únicas palabras que dijo Herbas antes de ingresar a las oficinas de la Fiscalía, acompañado de su abogado defensor.
El extrabajador de la Alcaldía no había sido notificado para declarar y su presentación la hizo de manera sorpresiva el miércoles. El martes la comisión de fiscales, compuesta por Yolanda Aguilera, Marcela Terceros y Mirtha Mejía, allanó su vivienda durante los operativos de búsqueda de Antonio Parada Vaca, exsecretario de Recursos Humanos. En el lugar se encontró un arma de fuego, según el reporte policial.
Según los registros de la Alcaldía cruceña, Herbas ingresó a trabajar como «Encargado B» con un salario de Bs 4.485 y en 2018 llegó a ganar un haber básico de Bs 6.239.
Herbas, fue imputado por los delitos de incumplimiento de deberes, legitimación de ganancias ilícitas, conducta antieconómica y contratos lesivos al Estado.
En la audiencia que inició a las 9:15 de ayer, Herbas manifestó que actuó bajo amenazas de Antonio Parada Vaca, principal investigado en este caso, con retirarlo de su fuente laboral e insistió que su única función fue entregar dinero a unas cuantas personas.
“Yo era amenazado por el señor Parada con botarme de mi fuente laboral. Lo que hice fue presentarle a algunas personas y me entregaba 300 o 400 bolivianos para entregarles a esas personas. Yo nunca ocupé un cargo jerárquico, señor juez”, dijo entre lágrimas.
RECLUTABA PERSONAL
La fiscal Terceros, señaló que las investigaciones apuntan a Herbas como el reclutador de las personas que estaban dispuestas a prestar sus nombres para firmar los contratos. Les ofrecía trabajar en la alcaldía y les pedía sus documentos personales para hacer la solicitud de contrato.
“(Los testigos) refieren conocer al denunciado Julio César Herbas Aguilera siendo él quien los contactaba y reclutaba entre otros más que conformaban un grupo de hinchas integrantes de una barra de fútbol de un equipo cruceño para ofrecerle ítems para un supuesto cargo en la Alcaldía”, señala la imputación de la Fiscalía.
De acuerdo a las investigaciones, Herbas empezó a captar a sus amigos de confianza con los que jugaba fútbol desde el año 2014. Les ofrecía trabajar en la Alcaldía y les pedía sus documentos personales para hacer la solicitud de contrato.
Las personas eran contratadas por el municipio, pero muchas de ellas se enteraron meses después que habían sido aceptadas y cuando hacían sus reclamos Herbas les ofrecía pagar 300 bolivianos “sin hacer nada”.
Además, les daba Bs 50 más si metían a otras personas de confianza en los “’ítems fantasma”, como si se tratase de una red piramidal.
“Ellos nos hablaron de un sueldo básico, de Bs 2.000 o 3.000. Yo con el tiempo fui atando cosas y me percaté que en mi cuenta ingresaban montos de Bs 6.000 y había meses que en mi cuenta tenía Bs 14.000 y al día siguiente no tenía nada. Yo no gestionaba nada de eso. Yo por cumplir con un trato de palabra no reclamaba. Julio Herbas alegaba que primero hay una estructura a la que se le tenía que dar de comer para que luego tengamos el ítem. El trato era que nosotros le teníamos que dar un tiempo de gracia para que ellos ganen utilizando nuestro nombre y luego el ítem quedaba con nosotros”, explicó a El Deber, uno de los testigos claves del caso.
Herbas también era la persona que supuestamente cobraba los sueldos y les entregada en efectivo y de manera personal los Bs 300 a cada uno de los involucrados en los ítems fantasma.
“Julio Herbas nos lo entregaba en físico, nos buscaba y nos entregaba. Ese era el trato, que nunca nos causen un problema. El trato también era que nosotros nunca vayamos a la entidad bancaria donde supuestamente nos pagaban. Nosotros confiamos en que nos iban a dar el trabajo, ese fue el motivo de todo”, contó el testigo.
Además, las declaraciones coinciden en que Herbas era uno de los hombres de confianza de Antonio Parada, el exsecretario de Recursos Humanos y el principal investigado en este caso.
Los otros miembros del entorno de Parada, son los exfuncionarios; Javier Carrasco y Javier Cedeño, quienes también están investigados.