“Comunicamos al pueblo boliviano que, mediante el operativo Guaporé (…) se aprehendió a cuatro sujetos (nacionales y extranjeros), se secuestraron armas y 160 paquetes de cocaína con un peso aproximado de 166,8 kilogramos, además se encontró una pista clandestina de más de un kilómetro de distancia”, escribió Del Castillo en sus redes sociales.
Resaltó la coordinación y el trabajo ejecutado con efectivos policiales de la Policía del Brasil para combatir estos delitos.
Sobre el caso, la Policía Federal de Brasil en Mato Grosso, reportó que en un trabajo conjunto entre la Policía Boliviana y la policía internacional, se encontró un megalaboratorio de cocaína en el Parque Noel Kempff Mercado, en un área ubicada casi a dos kilómetros de la frontera con Brasil.
“Se trata de una de las mayores estructuras utilizadas para la refinación de cocaína jamás desmantelada en la región, en un minucioso trabajo desarrollado a través de la cooperación entre las fuerzas policiales de Brasil y Bolivia. Se calcula que el laboratorio tendría capacidad para refinar aproximadamente dos toneladas por semana, un total de 10 toneladas por mes”, se lee en el informe.
La Policía Federal hizo el seguimiento a este tipo de megafábrica desde hace dos años, y se dio el golpe el lunes 28 de febrero por el intercambio de información entre las fuerzas policiales de los dos países.
La hipótesis inicial era que la pasta base de cocaína llegaba al laboratorio en avión, en grandes cantidades, y allí se refinaba hasta convertirla en clorhidrato de cocaína (polvo de cocaína).
Más tarde, se embalaba, se trasladaba a través del río Guaporé hasta Brasil, donde se cargaba en barcos o camiones por Comodoro.