“Se va a acudir a instancias internacionales, inclusive de ser necesario, porque los derechos humanos de Marco han sido vulnerados de formas inimaginables. Entonces yo creo que es importante que la comunidad internacional sepa que mientras no haya un cambio real del poder judicial, este puede ser el destino de cualquiera de los ciudadanos bolivianos”, dijo Castellón.
Por otro lado, la senadora Centa Rek manifestó que la muerte de Aramayo, y otros similares en las cárceles del país, no quedarán en la impunidad y serán denunciados ante instancias internacionales defensoras de los derechos humanos.
En ese marco, anunció que denunciará el hecho para que los responsables sean juzgados y sentenciados; ya que no se trata del único caso de persecución y tortura estatal contra un detenido político.
“El caso de Aramayo no es el único crimen cometido por la justicia boliviana, que es el brazo criminal del MAS (Movimiento al Socialismo) y de su poder político, está el caso del coronel de Policía Javier Vaca, quien falleció en octubre pasado en circunstancias similares a las del exdirector del Fondioc, por lo que no pueden pasar desapercibidas y quedar en la impunidad”, dijo.
Apuntó que el 27 de octubre de 2021, Vaca, falleció también por falta de asistencia humanitaria en una cárcel boliviana.
“Este coronel de Policía durante los penosos y lamentables sucesos de 2019, después de que se cometió el fraude electoral, salió a defender la zona Sur de La Paz que estaba siendo atacada por huestes masistas”, recordó Rek.
Agregó que el coronel Vaca fue detenido y encarcelado por sus acciones en el cumplimiento de su deber en 2019, por “el brazo criminal de la justicia boliviana y murió porque fue privado de asistencia médica, lo mismo que ocurrió por Marco Antonio Aramayo”.
“No es posible que seamos testigos de semejantes vejámenes y de crímenes contra personas que no han cometido delitos y que simplemente pretenden ser acalladas por un régimen que tapa la delincuencia de sus correligionarios, que tapa los fraudes electorales (…)”, añadió Rek.
Finalmente dijo que lo sucedido en el país son pruebas ineludibles de que “en Bolivia no solo no existe justicia, sino que la justicia esta aliada a un gobierno que por mantener el control del poder no tiene límites y está decidido a cometer este tipo de delitos, de atrocidades incluso a costa de la vida de personas, víctimas de juicios sin base jurídica y en detención preventiva”.