Nueva York.- El secretario general, António Guterres, abrió la Asamblea General de la ONU, haciendo sonar la señal de «alarma» ante un mundo que «nunca ha estado tan amenazado ni tan dividido».
«El mundo debe despertar. Estamos al borde de un abismo y moviéndonos en la dirección equivocada», dijo Guterres a los líderes internacionales reunidos en Nueva York
El diplomático portugués presentó un sombrío análisis de la coyuntura internacional, marcada a su juicio por la falta de unión en la respuesta a la pandemia, los pocos avances en la lucha contra el cambio climático, las crecientes desigualdades y las crisis en países como Afganistán, Yemen y Etiopía, reportó DW Alemania.
La desigualdad en la vacunación contra la Covid-19, con países ricos que han inmunizado ya a la mayoría de su población mientras más de un 90 por ciento de África espera aún su primera dosis, supone una «obscenidad» y un fracaso ético, según denunció este martes el jefe de la ONU, António Guterres.
Según la agencia EFE, el portugués, en su discurso de apertura de la Asamblea General de Naciones Unidas, criticó con dureza la falta de solidaridad en este ámbito y la destacó como un reflejo de los grandes problemas del mundo actual.
Los líderes mundiales volvieron a Nueva York este año después de un evento virtual en 2020 por la pandemia. Como el coronavirus sigue haciendo estragos, alrededor de un tercio de los 193 estados miembro de la ONU vuelven a estar conectados de forma remota, pero los presidentes, primeros ministros y cancilleres del resto han viajado a Estados Unidos.
De los 5.700 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus que se han administrado en todo el mundo, sólo el 2 % ha sido en África. Guterres está impulsando un plan global para vacunar al 70% del mundo para el primer semestre del próximo año, detalló Reuters.
El secretario general, que inicia un segundo mandato de cinco años al frente del organismo el 1 de enero, también advirtió del aumento de las tensiones entre China y Estados Unidos.
«Me temo que nuestro mundo se está arrastrando hacia dos conjuntos de reglas económicas, comerciales, financieras y tecnológicas, dos enfoques divergentes en el desarrollo de la inteligencia artificial y, en última instancia, dos estrategias militares y geopolíticas diferentes», sostuvo.
«Esta es una receta para tener problemas. Sería mucho menos predecible que la Guerra Fría», dijo Guterres.
De acuerdo con Europa Press, la paz, los Derechos Humanos, la dignidad para todos, la igualdad, la justicia y la solidaridad, los «valores fundamentales», están «en el punto de mira» mientras «la falta de resultados» proporciona «oxígeno para soluciones fáciles y las teorías de la conspiración», convirtiéndose en «el combustible para avivar antiguos agravios», como la supremacía cultural o la dominación ideológica, ejemplificó Guterres.
En referencia a la geopolítica mundial, ha precisado que se está viviendo «una explosión de tomas de poder por la fuerza», con el regreso de los golpes militares, y con una imposición de la «sensación de impunidad», al mismo tiempo que es «imposible» abordar los retos económicos y de desarrollo mientras «las dos mayores eocnomías del mundo estén enfrentadas». Para abordar estos problemas se necesita «cooperación, diálogo y entendimiento», concluyó. (Reuters Agencias)