La fiscal de materia Zulma Corrales, explicó que Daniel C. V. era expareja de la madre de las víctimas y aprovechó la relación de amistad que aún mantenía con la familia para ingresar a su domicilio, y el 1 de enero del 2022 vio que la niña de 10 años se encontraba sola y procedió a cometer el ilícito. Cuando la madre de la niña retornó a su domicilio sorprendió a su expareja agrediendo a su hija.
La hermana de la víctima contó que también fue violada dos días antes, cuando el agresor la acompañó a su domicilio.