El artículo 32 del proyecto de Ley de Carrera de Generales y de Ascensos de la Policía Boliviana prevé el aumento de cinco a 20 generales, manifestó el abogado Jorge Santistevan, quien calificó el extremo como político, ya que la solución no pasa por jerarquizar los cargos sino por equipar a la institución verde olivo.

El jurista aclaró que el Estado boliviano, como los demás países, necesita de una Policía para la defensa de la sociedad y conservación del orden público.

“Resulta nociva e irrelevante una ley de ampliación de la carrera policial en tres niveles de generalato, frente a una policía debilitada por no estar ceñida a las necesidades institucionales, debido a dificultades presupuestarias, carencia de medios y mejores condiciones de vida de los policías”, advirtió.

Apuntó que una ley de esta magnitud es “desprolija” porque intenta remediar una profunda debilidad institucional, al beneficiar a pocos en desmedro de muchos.

“La ampliación de 20 generales en la institución verde olivo es irrelevante para la sociedad que clama seguridad ciudadana y mayor eficacia en la lucha contra el crimen, es posible que en adelante veamos a muchos generales luciendo estrellas doradas y condecoraciones, frente a una Policía mal uniformada y que no ha cambiado nada en su esencia, por el abandono de las autoridades políticas”, advirtió.

Santistevan manifestó que si el criterio del ascenso es igualar a la cantidad de generarles y almirantes de las Fuerzas Armadas (FFAA), como lo había sugerido anteriormente el Ministro de Gobierno, sería una demagogia política porque ambas instituciones son diferentes a partir de la misión, estructura, doctrina, material, equipo y medios humanos diferentes.

“Las FFAA nacieron antes de la República y luego de tantos años de servicio y vida institucional al servicio del país apenas cuentan con 21 generales y almirantes para las tres fuerzas (Ejército, Aérea y Naval), mientras que la Policía por una ley de contenido altamente político, de pronto aparecen con 20 generales, similar a una estructura militar”, advirtió.

Acotó que las FFAA cuentan con medios materiales importantes para la seguridad y defensa como embarcaciones, aviones de combate, aviones de transporte de personal, de carga y también elementos grandes en tierra como blindados, además de una gran cantidad de personal y efectivos especializados.

“El proyecto es básicamente un engaño tanto para la Policía como para la sociedad boliviana porque de nada sirve beneficiar a unos pocos en desmedro de todos. De nada sirve beneficiar a unos cuantos generales en desmedro de la situación de todos los demás policías que necesitan más que el ascenso de sus superiores, atención social, buena atención médica, incremento de sus salarios y mejoramiento en equipo moderno para su propia protección y el cumplimiento de su tarea constitucional”, dijo.

Por otro lado, aseguró que el uso de la chacana en las estrellas es solo un “intercambio de favores al partido de Gobierno”.

“A partir de la promulgación de esa ley, pasarían a ser parte de un partido y no representarían a la sociedad boliviana, ya no pueden decir somos parte del pueblo. Lo importante es que reflexionen, están a tiempo, no pueden olvidarse de las promesas que le hicieron algunos políticos para mejorar los sueldos y su equipamiento. La chakana no significa nada como para postergar los objetivos de la institución policial y frustrar las aspiraciones de todo el personal”, lamentó.

PLANTÓN

Ayer, policías del servicio pasivo y esposas y policías protestaron mientras el pleno de la Asamblea Legislativa trataba el proyecto de ley.

“Se está manoseando nuestra Ley Orgánica, nosotros como el sector pasivo no vamos a permitir, somos una institución benemérita de la Patria, no somos un partido político donde se puede manejar como ficha de ajedrez a los generales, se tiene que respetar nuestro reglamento”, manifestó la presidenta del Consejo de jubilados de la Policía de Cochabamba, Noemí Valdivia.

“El designar al Ministro de Gobierno como al subcomandante general, con mando superior en la Policía, al Presidente del Tribunal Disciplinario, al Inspector General y designar a los comandantes departamentales, eso significa una injerencia política partidaria directa”, dijo el general en servicio pasivo, Fernando Mercado.

La representante de las esposas de policías Ruth Ajacopa remarcó que el proyecto de ley no es constitucional y en vez de incorporar civiles en la estructura policial, debería brindar mejoras integrales en la institución.

“Le decimos al señor Presidente que este proyecto de ley no es constitucional, y en lugar de preocuparse por incorporar a gente civil dentro de la estructura policial, debería más bien preocuparse por la salud del personal policial, del salario de las clases policiales”, dijo.

GOBIERNO

El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, lamentó ayer que algunos asambleístas de oposición y dirigentes del servicio pasivo de la policía tergiversen la información respecto al proyecto de ley. Según la autoridad, la norma fue consensuada con distintos sectores pero, además, fue presentada por la institución del orden.

“Este ha sido un anteproyecto presentado por policías bolivianos, por policías que están planteando una reestructuración al interior de la Policía boliviana que pretenden mejorar y dar certeza a todo el plan de carrera al interior de la policía boliviana”, señaló.

El comandante general de la Policía, coronel Jhonny Aguilera, respaldó la aseveración del Ministro de Gobierno y aclaró que la norma permitirá que personal subalterno ocupe cargos en la institución.

“Esta es una norma que ha sido largamente anhelada y que permite no solamente reivindicaciones de nivel de oficiales sino sobre todo la introducción de nuestro personal subalterno que indudablemente merece no solamente ser tratado de manera digna sino dada la cantidad que representa y las actividades que efectúan, formar parte de un nivel de asesoramiento que permita una toma de decisiones que sean conjuntas”, puntualizó.

Por la noche, desde el Ministerio de Gobierno enviaron fotografías donde se observa a Del Castillo compartiendo con efectivos policiales, esperando la aprobación del proyecto de ley.

no existe ningún malestar dentro de las filas policiales