El presidente de San José, Wilson Martínez, vive con el Jesús en la boca, porque las deudas de gestiones anteriores a la suya siguen apareciendo, por lo cual tiene dos mandamientos de apremio en su contra con la demanda de una empresa de indumentaria deportiva y otra de un médico que prestó servicios en el club orureño hasta el 2016.
No se encontro contenido.