Según Uzquiano, su despido no solo atenta contra su derecho laboral, sino que se busca intimidar y sembrar miedo en el resto de guardaparques, para flexibilizar la preservación y protección de las áreas protegidas frente a las actividades mineras ilegales.

Luego de que el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) despidiera de manera sorpresiva a varios de sus guardaparques por denunciar el ingreso abusivo de maquinaria para minería ilegal en áreas protegidas, estos extrabajadores señalaron que se trata de una represalia y exigen la destitución del director del Sernap.

Dos años después de conocerse que una cooperativa minera habría ingresado irregularmente a áreas protegidas del Beni para sus actividades ilegales, el guardaparques y ahora exdirector de la Asociación de Guardaparques de Bolivia, Marcos Uzquiano, junto con su colega, Guido García Carballo, director del Área Natural de Manejo Integrado (ANMI) Kaa Iya del Gran Chaco., fueron cesados en sus funciones.

Uzquiano, conocido por su lucha en defensa del medio ambiente, expresó su rechazo en redes sociales. “Podrán arrebatarme el cargo, pero jamás el espíritu de lucha y defensa de nuestras áreas protegidas. Es la típica actitud cobarde con la cual la Dirección Ejecutiva más nefasta de la historia del Sernap, a cargo de Johnson Jiménez Cobo, pretende acallar la voz de los guardaparques”.

Para Uzquiano, “los despidos son una represalia” a la lucha en contra de la minería ilegal, los avasallamientos y el tráfico de flora silvestre que viene ocurriendo en las 24 áreas protegidas de Bolivia. Considera que su retiro y el de su colega “ponen en una situación de mayor vulnerabilidad a las áreas protegidas” que son constantemente acechadas por la depredación de la minería ilegal.

La organización medioambiental Ríos de Pie alertó que el Gobierno boliviano “aprovechó el feriado” de año nuevo para despedir injustificadamente a los guardaparques, mediante memorándums.

“Desde Ríos de Pie denunciamos estas acciones injustificadas e irregulares del Sernap, institución cuyo mandato es proteger nuestras áreas protegidas y en realidad es partícipe de su destrucción. También denunciamos al actual director ejecutando estos despidos, Jhonson Jiménez, quien carece de mérito profesional para ocupar el cargo que ejerce”, señaló la organización en un comunicado.

El documento de despido data del martes 30 de diciembre de 2024, en la cual se menciona una Resolución Ministerial N° 396 se prescinde de los servicios de Marcos Enrique Uzquiano Howard como jefe de Protección de la Reserva de la Biósfera Estación Biológica del Beni, estableciendo el 31de diciembre pasado como su último día laboral. Lo mismo sucede con Guido García Carballo.

Uzquiano aseguró que su despido no solo atenta contra su derecho laboral, considerando que poseía ítem, sino que se busca intimidar y sembrar miedo en el resto de guardaparques, para flexibilizar la preservación y protección de las áreas protegidas frente a las actividades mineras ilegales.

DEFENSORÍA PIDE INFORME

Tras conocerse esta decisión en contra de los protectores de las reservas naturales, la Defensoría del Pueblo solicitó al Sernap un informe sobre los pormenores de la determinación asumida.

“El Sernap emitió memorándums de (despido) a funcionarios que obtuvieron reconocimientos incluso a nivel internacional, entre ellos a Marcos Uzquiano Howard, Guido García Carballo, Gonzalo Gutiérrez Quispe y Aníbal Alfredo Alfaro Vega”, señala la solicitud, que fue presentada ayer sin una respuesta positiva por parte de la institución estatal.

ANTECEDENTES

En marzo de 2023, Uzquiano denunció un intento de ingreso de maquinaria pesada al Parque Nacional Madidi, lo que derivó en procesos legales en su contra, iniciados por exdirigente de la Federación de Cooperativas Mineras Auríferas del Norte de La Paz (Fecoman), Ramiro Cuevas Echave.

Cuevas acusó a Uzquiano y al guardaparques, Raúl Santa Cruz, de difamación y calumnias. Sin embargo, en febrero de 2024, ambos fueron absueltos al considerar insuficientes las pruebas presentadas por el acusador, lo cual se había considerado una victoria de los defensores del medio ambiente sobre el abuso de la minería aurífera ilegal.