Ambas partes se atribuyeron éxitos en lo que se convirtió en la batalla más larga desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania hace más de un año.
Funcionarios ucranianos afirmaron que sus fuerzas terrestres derribaron un caza ruso cerca de Bajmut y lograron avances en el norte de la ciudad.
Mientras tanto, Yevgeny Prigozhin, fundador del grupo mercenario Wagner, que encabezó el asalto ruso a la ciudad, afirmó en una publicación en las redes sociales que las fuerzas rusas tomaron el control del asentamiento de Zaliznyanskoye y están ampliando el cerco de Bakhmut.
La batalla por Bakhmut se intensificó luego de que las fuerzas rusas capturaran la cercana ciudad de Soledar en enero. Las fuerzas rusas deben atravesar Bakhmut para adentrarse en partes de la provincia de Donetsk que aún no controlan, aunque los funcionarios occidentales afirman que la captura de la ciudad tendría un impacto limitado en el curso de la guerra.
Una evaluación del Ministerio de Defensa del Reino Unido durante el fin de semana dijo que las unidades paramilitares del Grupo Wagner habían tomado partes orientales de Bakhmut, con un río que fluye a través de la ciudad marcando la línea del frente de los combates.
Las tropas rusas rodearon la ciudad por tres lados, dejando sólo un estrecho corredor hacia el oeste. La única carretera hacia el oeste fue blanco del fuego de la artillería rusa, lo que obligó a los defensores ucranianos a recurrir cada vez más a los caminos rurales, difíciles de utilizar antes de que se seque el terreno embarrado.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, discutió la situación en Bakhmutcon altos cargos militares y de inteligencia, y todos coincidieron en la necesidad de mantener y defender la ciudad, según informó la oficina presidencial.
Zelensky destituyó ayer a los gobernadores de las regiones de Lugansk (este), Jmelnytskyi (centro) y Odesa (sur), según correspondientes decretos publicados en la página web de la Presidencia de Ucrania.
Los tres gobernadores habían solicitado ser relevados de sus puestos, una medida que ya fue aprobada por el Consejo de Ministros.
Serhiy Haidai era gobernador de Lugansk, donde fuerzas ucranianas y rusas libran en estos momentos la batalla por el control de la ciudad de Bakhmut- desde el 25 de octubre de 2019 y en los últimos meses habían surgido rumores de que iba a ser relevado de su cargo y nombrado embajador de Ucrania en Kazajistán.
En el caso del hasta ayer gobernador de Odesa, Maksym Marchenko, que ocupaba el puesto desde el 1 de marzo del año pasado, los medios ucranianos apuntaron al elevado número de escándalos de corrupción en esa región como una de las posibles causas para la destitución.
Por su parte, Serhiy Gamalii dirigía la administración de Jmelnytskyi desde diciembre de 2020. De momento no se hicieron públicos los nombres de los sucesores de los tres gobernadores. (Infobae)