“Hacia las 05H00 (02H00 GMT), la región de Chernihiv fue sometida a un bombardeo masivo de misiles. Veinte cohetes apuntaron contra el pueblo de Desna, lanzados desde territorio de Bielorrusia [y también] desde el aire”, anunció en Facebook el mando Norte de las tropas ucranianas, precisando que, de momento, no se registraron víctimas.
“Una infraestructura fue alcanzada”, precisó el ejército ucraniano, sin indicar si esta era militar o no.
”El bombardeo de ayer está directamente relacionado con los esfuerzos del Kremlin en atraer a Bielorrusia a la guerra en Ucrania como cobeligerante”, afirmó en Telegram la dirección general de los servicios de inteligencia ucranianos, dependiente del Ministerio de Defensa.
Desna, una localidad que tenía unos 7.500 habitantes antes de la guerra, se encuentra a 70 km al norte de Kiev y a la misma distancia de la frontera con Bielorrusia, más al norte.
El bombardeo se produjo antes del encuentro previsto entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo bielorruso, Alexander Lukashenko, ayer en San Petersburgo. El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, tiene previsto viajar a Bielorrusia el jueves y el viernes.
Bielorrusia ha servido de apoyo logístico a las tropas de Moscú en su ofensiva contra Ucrania, iniciada el 24 de febrero, sobre todo en las primeras semanas de conflicto.
Como Rusia, Bielorrusia -que Lukashenko dirige desde 1994- también se ha visto afectada por las sanciones occidentales.
El G7 responsabilizó a Rusia por la crisis alimentaria y pidió soluciones.
Los ministros de Exteriores del G7 reiteraron su condena a la guerra de agresión a Ucrania, responsabilizaron a Rusia de la crisis alimentaria mundial y pidieron desbloquear los puertos ucranianos para dar salida al trigo de ese país.
En un comunicado tras una reunión en Berlín, en la que participan además en una conferencia internacional sobre la crisis alimentaria con representantes de otros países, los ministros recordaron que, además del bloqueo a los puertos en el mar Negro, Rusia está bombardeando depósitos de trigo e infraestructura agrícola.
Además, acusaron a Rusia de propagar una narrativa falsa y hacer una campaña de desinformación con respecto a las sanciones, que no afectan a los alimentos, por lo que los productos agrícolas rusos podrían llegar a los mercados mundiales.
Los ministros exigieron cesar del bloqueo de los puertos del mar Negro para permitir la exportación de alimentos y detener los ataques.
Además, expresaron su respaldo a los esfuerzos de la ONU por reabrir la ruta del mar Negro para cereales y el plan de acción de la Comisión Europea para crear una “Ruta de Solidaridad” para el transporte de grano por tierra.
Asimismo, los ministros reiteraron que Ucrania recibirá apoyo político y militar el tiempo que sea necesario y aseguraron además ayuda humanitaria y apoyo para la reconstrucción y la estabilización del país.
También ofrecieron apoyo a los países vecinos, en especial a Moldavia, especialmente afectados por el flujo de refugiados ucranianos.
Por último, celebraron la decisión del Consejo Europeo de conceder a Ucrania, Moldavia y Georgia el estatus de candidatos al ingreso a la Unión Europea. (Infobae)