Turquía cerró su espacio aéreo a todos los vuelos rusos hacia Siria, anunció el canciller Meviut Cavusoglu ayer citado por los medios turcos.
La medida constituye una respuesta contundente a la invasión de Ucrania por Rusia, un país con el cual Turquía había mantenido hasta ahora una actitud cercana, pese a ser un país miembro la Organización de Tratado Atlántico Norte (OTAN).
“Cerramos el espacio aéreo a los aviones militares rusos y también a los aviones civiles que se dirigen a Siria”, declaró el jefe de la diplomacia turca, a la vez que precisó que la prohibición durará tres meses.
El canciller agregó que ya había comunicado la decisión al ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, quien la transmitió al presidente Vladimir Putin.
Rusia es uno de los principales aliados del régimen de Siria desde el inicio de la guerra civil en este país en 2011.
Algunos expertos consideran que la medida turca puede complicar la ayuda militar de Rusia al presidente sirio Bashar al Asad. (DW Alemania)