Moscú.- Las autoridades de Rusia expulsaron ayer a un alto funcionario de la Embajada estadounidense en Moscú, Bart Gorman, en pleno aumento de la tensión en torno a Ucrania ante la amenaza de una posible invasión por parte de tropas rusas.
Un portavoz del Departamento de Estado estadounidense confirmó esta expulsión, que considera como un paso más en la escalada de tensiones. En este sentido, ha declarado que no ha habido ninguna «provocación» que lo justifique y ha anticipado que habrá «respuesta» por parte de Washington, según la cadena CNN.
«Instamos a Rusia a terminar con estas expulsiones infundadas de diplomáticos y personal estadounidense y trabajar de forma productiva para reconstruir nuestras misiones», reclamó el portavoz y dijo que acto seguido recordó que, «ahora más que nunca», esta presencia es «necesaria» para facilitar la comunicación entre las dos potencias.
La propia Embajada también recalcó que la expulsión es «injustificada». Un portavoz, Jason Rebholz, ha señalado en declaraciones a la agencia rusa Sputnik que «Gorman era el segundo funcionario de mayor rango en la Embajada de Estados Unidos en Moscú después del embajador y un miembro clave de la dirección de la legación».
Asimismo, apuntó que Gorman contaba con un visado de tres años y su estancia en el país no había excedido el plazo en cuestión y, al igual que el Departamento de Estado, ha asegurado que Estados Unidos «responderá» a estas acciones.
La noticia llega en un momento de creciente tensión entre la comunidad internacional y Rusia en torno a Ucrania. Estados Unidos y sus aliados siguen acusando a Moscú de planear una invasión del territorio, algo que el Kremlin rechazó. (Europa Press)