Según se informó las Fuerzas Armadas de Rusia cuentan con 2 millones de personas, de los que 1.150.628 son militares, tras entrar en vigor el 1 de enero un decreto de Putin para aumentar en 137.000 personas el número de personal militar.
Shoigú recalcó que los cambios a gran escala en la composición de las Fuerzas Armadas, un aumento en su número, un cambio en la división militar-administrativa de Rusia, que se realizará entre 2023 y 2026, requerirán la toma de decisiones apropiadas.
El ministro explicó que se crearán dos nuevos distritos militares, los de Moscú y Leningrado, así como agrupaciones de fuerzas en los territorios de las nuevas entidades constitutivas de Rusia, es decir las regiones ucranianas de Kherson, Zaporizhia, Donetsk y Lugansk, anexionadas en septiembre por el Kremlin.
La autoridad indicó que además se formará un cuerpo de Ejército en la República de Karelia, fronteriza con Finlandia, tres divisiones de fusileros motorizados como parte de las Fuerzas Terrestres y dos divisiones de asalto aéreo en las Fuerzas Aerotransportadas.
A su vez adelantó que se reorganizarán en siete brigadas de fusileros motorizados en los distritos militares occidental, central y oriental y en la Flota del Norte, y se fortalecerá el componente de combate de la Armada, las Fuerzas Aeroespaciales y las Fuerzas de Misiles Estratégicos.
El ministro llamó especialmente la atención sobre el hecho de que todas las medidas deben combinarse en un Plan Integral para aumentar la composición y la fuerza del Ejército y sincronizarse con la entrega de armas y equipo militar, así como con la construcción de infraestructuras para el despliegue de las tropas.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo a su vez que el aumento del número de los efectivos para el Ejército se debe a la guerra proxy que libra el Occidente colectivo contra Rusia.
Esta guerra proxy, agregó, incluye elementos económicos, financieros, legales y cuenta con la participación indirecta de países occidentales en el enfrentamiento con Rusia. (Infobae).