Kramatorsk (Ucrania).- Al menos 50 personas murieron, incluidos cinco niños, por un ataque con misiles contra una estación de trenes en la ciudad de Kramatorsk, en el este de Ucrania, informó ayer el gobernador regional Pavlo Kyrylenko.
Reuters informó que en una actualización de la cifra preliminar de 39 fallecidos por el incidente, Kyrylenko dijo que la cifra aumentó a medida que las víctimas graves fallecían en el trayecto a hospitales para ser atendidas.
Las autoridades locales acusaron a Rusia de bombardear un centro ferroviario donde había personas a punto de ser evacuadas. Moscú niega haber atacado a civiles.
Según Europa Press, el jefe de la administración militar regional de Donetsk, Pavlo Kirilenko, ha destacado en su cuenta en Telegram que medio centenar de personas han perdido la vida, cinco de ellas niños. Entre estas víctimas figuran al menos doce de los 98 heridos evacuados a hospitales de la zona.
Kirilenko acusó a «los nazis rusos de disparar un misil Tochka-U contra la estación de tren de Kramatorsk, «desde donde salen trenes para evacuar a residentes de la región de Donetsk a regiones más seguras en Ucrania».
De acuerdo con el responsable, miles de personas estaban en la zona cuando se produjo el ataque, dado que «los residentes de Donetsk están siendo evacuados a regiones más seguras en Ucrania».
Kramatorsk se encuentra en la zona de Donetsk no controlada por la autoproclamada República Popular de Donetsk, los rebeldes separatistas aliados de Moscú.
«Los rusos están intentando afectar de forma deliberada la evacuación de civiles. Para ellos, las vidas son una moneda de cambio y una herramienta para lograr sus cínicos objetivos», manifestó, antes de incidir en que «la evacuación continuará» y que «cualquiera que quiera abandonar la región podrá hacerlo».
«Los racistas sabían bien a dónde apuntaban y lo que querían», reseñó Kirilenko, que agregó que Moscú «quiere destruir todo lo ucraniano. Rusia es un país de villanos y criminales. El mal debe ser detenido y castigado», remachó.
El ataque fue condenado por el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, que ha acusado a «los ocupantes» de disparar un misil contra la estación, donde «miles de ucranianos pacíficos esperaban a ser evacuados».
«Cerca de 30 personas han muerto y alrededor de cien han resultado heridas de diversa consideración», ha manifestado en su cuenta en Telegram, al tiempo que ha denunciado que «los inhumanos rusos no abandonan sus métodos».
«Al no tener la fuerza y el valor para hacernos frente en el campo de batalla, están destruyendo de forma cínica a la población civil. Es una maldad que no tiene límites y que, si no es castigada, nunca se detendrá», resaltó.
Tanto Rusia como las autoridades de la autoproclamada República Popular de Donetsk, cuya independencia fue reconocida por Moscú días antes del inicio de la invasión, se han desvinculado del ataque y han dicho que los misiles «Tochka-U» son usados únicamente por el Ejército ucraniano. (Agencias)