Los asistentes marcharon con velas y pancartas negras para concentrarse en las vigilias convocados en siete puntos de la ciudad.
Por su parte las autoridades anunciaron una investigación sobre lo ocurrido y se registraron oficinas municipales, comisarías y estaciones de bomberos. La Policía Nacional y el presidente Yoon Suk Yeol se han disculpado por lo ocurrido y se prometieron mejorar las medidas de seguridad para futuras ocasiones.
Sin embargo, esta respuesta no bastó a una población indignada por lo ocurrido. El acto con más seguimiento fue el convocado junto al Ayuntamiento por Acción de Velas, una coalición de organizaciones progresistas que ya habían convocado protestas contra el presidente Yoon incluso antes de la tragedia de Itaewon.
Decenas de miles de personas ocuparon la calle con pancartas negras con lemas como dimitir es una expresión de condolencias dirigidos directamente a Yoon.
Los intervinientes tomaron el escenario para criticar al Gobierno acompañados por canciones de luto y oraciones de monjes budistas. «El Gobierno tiene una responsabilidad evidente, pero busca a responsables entre organizaciones irrelevantes (…). El Gobierno no cumplió con su función principal», reprochó uno de los oradores. «¡Dimite, gobierno de Yoon Suk Yeol! ¡Dimite, gobierno de Yoon Suk Yeol!», ha espetado la multitud en respuesta.
En el lugar del accidente se concentraron unas 200 personas convocadas por partidos políticos y mostraron pancartas con lemas como «A las 18.34 el país no estaba ahí», en referencia a la hora de la primera llamada recibida por el servicio de emergencias, horas antes de la avalancha.
Tras un minuto de silencio marcharon por el callejón de la tragedia portando crisantemos, la flor del luto en la cultura coreana. «Podríamos haber salvado a las víctimas. El Gobierno debe reconocer su responsabilidad», rezaba una de las pancartas. (Europa Press)