Una encuesta de Associated Press (AP) ha revelado que la popularidad del Joe Biden ha caído en los últimos meses. Este sondeo destaca que ahora el 50 % de los encuestados aprueban al Presidente, mientras que el pasado agosto, la cifra era del 54 % y del 59 % en julio.
Mientras que su popularidad ha caído casi 10 puntos en tres meses, entre quienes se consideran independientes, las cifras han caído del 62 % al 38 %.
La encuesta revela, sin embargo, entre quienes “tienen sentimientos encontrados sobre Biden, prefieren su gestión a la de Trump”, y solo el 34 % “dicen que el país está encaminado en la dirección correcta”.
El pasado marzo, cuando Biden llevaba tres meses en la presidencia, el 60 % de los americanos aprobaban la forma en la que el presidente manejaba la economía. Ese porcentaje bajó al 47 % en agosto.
Sobre el coronavirus, la encuesta revela que el 57 % aprueban su gestión de la pandemia. Esa cifra ha variado en un 9% desde el julio pasado, publicó 20minutos.es
Uno de los mayores problemas de Biden son los asuntos exteriores. El 43 % de los americanos dicen aprobar su gestión en general, pero solo el 34 % aprueba la gestión de Afganistán.
Incluso dentro de su partido, solo el 54 % de los simpatizantes lo hacen, frente al 10 % de republicanos.
Por otro lado, recientemente, el gobierno lanzó La iniciativa Build Back Better World (B3W), “un proyecto que promete fortalecer los lazos con América Latina y reducir las amplias brechas que existen en términos de infraestructura física, digital y humana”, se presentó durante la reunión del G7 en junio y es hoy que Washington, mediante el asesor adjunto en Seguridad Nacional, Daleep Singh, pretende retomar control en el lado sur del continente, en medio de la crisis migratoria que Biden no puede controlar, según reporte de VOA.
El anuncio no parece casual, luego que los países “no alineados” del bloque del Foro de Sao Paulo o Grupo de Puebla se reunieran hace unas semanas en la VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) desarrollada en México, donde se volvió a cuestionar la “hegemonía” de EEUU ante América Latina, además de plantear el “reemplazo” de la Organización de Estados Americanos (OEA) a la que los jefes socialistas acusan de “injerencista”.
El economista brasileño Tulio Ribeiro afirmó en Telesur, que la cumbre de México se dio “luego del intento del relanzamiento de la Doctrina Monroe por parte de Estados Unidos junto a países aliados, que buscaron poner fin a los grandes pasos en la integración regional con la Celac, la Unasur y el Mercosur”.(Agencias)