Francisco hizo sus comentarios a los participantes en una peregrinación interreligiosa de solidaridad con el pueblo ucraniano en Chernivtsi, en el oeste de Ucrania, organizada por el Instituto Interreligioso Elías, con sede en Israel.
“El momento actual nos deja profundamente preocupados, porque está marcado por las fuerzas del mal”, dijo en el mensaje leído en su nombre.
“El sufrimiento infligido a tantas personas frágiles e indefensas; los numerosos civiles masacrados y las víctimas inocentes entre los jóvenes; la situación desesperada de las mujeres y los niños (…) Todo esto perturba nuestras conciencias”, afirmó.
El presidente ruso Vladimir Putin, miembro de la Iglesia Ortodoxa Rusa, describió las acciones de Moscú como una “operación militar especial” en Ucrania, diseñada no para ocupar territorio sino para desmilitarizar y “desnazificar” el país.
Francisco, que ha rechazado esa terminología, calificándola de guerra, y ha hecho numerosos llamamientos para poner fin al conflicto, dijo que es imposible permanecer indiferente y que es necesario “hablar con fuerza para exigir, en nombre de Dios, el fin de estas acciones abominables”.
En una reunión de la peregrinación en la que intervinieron miembros clave, el exarzobispo de Canterbury Rowan Williams se hizo eco del reciente llamamiento del Papa a una tregua pascual en el conflicto. También asistieron judíos, hindúes, musulmanes, budistas y miembros de otras religiones.
En su mensaje, Francisco instó a “los líderes gubernamentales, especialmente a los que apelan a los principios sagrados de la religión”, a buscar la paz y evitar el mal. (Reuters)