El régimen de Nicolás Maduro y la oposición venezolana reanudaron ayer en México las negociaciones tras 15 meses de interrupción. Los delegados y los mediadores confirmaron un acuerdo parcial entre las partes para la protección social de los venezolanos.
El pacto constituye una «Mesa nacional de atención social», establece un fondo fiduciario para apoyar las medidas de protección social que será administrado por las agencias de la ONU en Venezuela y un Mecanismo de Seguimiento y Verificación,
El acuerdo incluye la inyección de recursos del Estado venezolano congelados en el exterior que también serán administrados por las agencias de la Naciones Unidas y no por la dictadura chavista.
Estos recursos estarán destinados progresivamente a reforzar el sistema público nacional de salud en equipamiento, recuperación de infraestructura, dotación de insumos, vacunas y medicamentos.
«A los fines de atender las necesidades más urgentes, se acuerda solicitar a la ONU apoyo en la implementación del marco programático, incluido el diseño, establecimiento e implementación de un fondo fiduciario único, que se denominaría Fondo para la Atención Social del Pueblo Venezolano», establece el acuerdo que leyó el facilitador del Reino de Noruega, Dag Nylander.
DIÁLOGOS FRUSTRADOS
El régimen y la oposición entablaron diálogos en México en agosto de 2021 tras fallidas iniciativas en 2018 en República Dominicana y 2019 en Barbados. Maduro los congeló dos meses después por la extradición a Estados Unidos del empresario Alex Saab, enjuiciado por lavado de dinero.
Ahora, la dictadura incluyó en su equipo negociador a Camila Fabri, esposa de Saab, incorporación a la mesa que exigió el mandatario.