Caracas.- Partidos de la oposición de Venezuela anunciarían esta semana si participan en los comicios de gobernadores y alcaldes del 21 de noviembre, en lo que sería la primera contienda electoral a la que acuden desde 2017, según tres fuentes conocedores del caso.
Los adversarios del presidente Nicolás Maduro se abstuvieron de participar en las elecciones presidenciales de 2018 y en los comicios parlamentarios de diciembre de 2020, bajo el argumento de que el proceso estaba amañado a favor del oficialismo.
Opositores en las regiones de Venezuela han estado presionando a sus líderes para que abandonen la estrategia abstencionista y han pasado semanas en conversaciones para forjar una plataforma unificada contra los aliados de Maduro.
Entre martes y miércoles se estima que la oposición anunciará su participación para escoger a 23 gobernadores y 335 alcaldes. El plazo para inscribir los candidatos a las elecciones regionales termina el 1 de septiembre, según el organismo electoral.
Para varios miembros de los principales partidos opositores como Voluntad Popular, Primero Justicia, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo, más allá de la elección de autoridades regionales, la cita de noviembre intentaría movilizar a la población para los comicios presidenciales del 2024.
Varios sondeos muestran que más de 50% de los entrevistados está dispuesto a sufragar, indicó una de las fuentes consultadas.
«Creemos que en las regionales se podría avanzar mucho (…)Siempre debemos plantear retos para que la gente siga luchando, dar la pelea por condiciones electorales», dijo otra de las fuentes consultadas.
El escollo que ha postergado el anuncio de la oposición es que algunos miembros de la coalición insisten en demandar garantías de imparcialidad electoral, así como que se levante la prohibición que pesa sobre algunos de sus dirigentes por investigaciones administrativas de la Contraloría, entre otros, agregaron dos de las fuentes.
La oposición participó en los pasados comicios de gobernadores en 2017, cuando consiguió 4 de las 23 jefaturas de los estados. Tras esa elección, el gobierno de Nicolás Maduro designó a funcionarios del oficialismo como «protectores» o máxima autoridad en esos gobiernos locales en manos opositoras, dejando a los mandatarios regionales sin mayores facultades.
Esta semana delegaciones de la oposición y el oficialismo retoman el diálogo en México para buscar salidas a la profunda crisis política de Venezuela. (Reuters)