Puerto España.- Varias agencias de Naciones Unidas condenaron la muerte de un bebé venezolano de un año que viajaba junto a su madre y otras 20 personas en una embarcación que fue interceptada con disparos por la Guardia Costera de Trinidad y Tobago.
La ONU puso de manifiesto la necesidad de incrementar la protección de los migrantes.
Así, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), la Oficina de Derechos Humanos (ACNUDH), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) han emitido un comunicado conjunto en el que “lamentan profundamente la noticia”.
“Estamos profundamente entristecidos por esta tragedia y transmitimos nuestras más sentidas condolencias a la familia y seres queridos que están de duelo por esta pérdida y una pronta recuperación a los heridos”, trasladó el representante especial conjunto de ACNUR y la OIM, Eduardo Stein, quien además ha remarcado que «nadie debería perder la vida en su búsqueda de seguridad, protección y nuevas oportunidades».
Asimismo, Stein aseveró que este incidente pone de manifiesto la «difícil situación» a la que se enfrentan aquellas personas que deciden afrontar viajes «desesperados y peligrosos» en busca de «un lugar seguro».
En este punto, las agencias de Naciones Unidas coincidió en remarcar que, ante la «ausencia de suficientes vías seguras», una gran cantidad de refugiados y migrantes venezolanos «se ven obligados a recurrir a cruces marítimos y terrestres arriesgados» que, además, se han vuelto cada vez «más complejos» debido a las restricciones de viaje y la coyuntura sanitaria, ambos aspectos provocados por la pandemia de coronavirus.
Ahondando en la muerte del menor, han instado a los estados firmantes de la Convención sobre los Derechos del Niño a «salvaguardar los derechos de todos los niños en su territorio», más allá de su nacionalidad o condición.
«Ningún niño migrante debería morir nunca, ya sea viajando con sus padres o solo. Ninguna madre quiere poner en riesgo la vida de sus hijos en un pequeño barco en alta mar, a menos que no tenga otra opción», añadió por su parte la directora regional de Unicef para América Latina y el Caribe, Jean Gough. (Europa Press)