El decreto presidencial plantea la necesidad de nuevos contactos con Moscú y se refiere a las «imprevisibles consecuencias legales de la cuestión sometida a referéndum», una consulta convocada por el antecesor de Gagloev, Anatoli Bibilov.
El texto cita además la «inadmisibilidad de tomar una decisión unilateral en referéndum sobre cuestiones que afectan a los derechos legítimos y a los intereses de la Federación Rusa», según recoge la web de la Presidencia de Osetia del Sur.
Gagloev ha ordenado la apertura de consultas con Moscú «sobre todas las cuestiones relativas a una mayor integración» de Osetia del Sur en Rusia y ha nominado a una delegación de personalidades políticas y judiciales que mantendrá los contactos con Rusia.
El mandatario de Osetia del Sur cuestionaba este domingo la claridad de la pregunta del referéndum en diálogo con diputados de la primera legislatura tras la secesión de Georgia.
Mientras, el Gobierno georgiano ha criticado la convocatoria del referéndum porque considera «inaceptable debatir cualquier referéndum mientras el territorio de Georgia está ocupado por Rusia».
La pequeña región de Osetia del Sur fue objeto de disputa, junto a la región de Abjasia, entre Rusia y Georgia, quienes mantuvieron una breve guerra en 2008.
Osetia del Sur, predominantemente agrícola y con unos 80.000 habitantes, ya está muy integrada en Rusia puesto que usa el rublo, cuenta con una base militar rusa y recibe buena parte de su presupuesto de Moscú. Sin embargo, Georgia sigue considerándola, al igual que a Abjasia, como territorios ocupados. (Europa Press)