Johnson anunció el pasado jueves que dimitiría como primer ministro, después de que legisladores y colegas del gabinete se rebelaron por su gestión de una serie de escándalos, incluida la violación de las normas de confinamiento en las reuniones de su oficina de Downing Street.
Johnson dijo que se quedaría hasta que se elija un nuevo líder. Es así que un miembro del comité del Partido Conservador que establece las normas para las elecciones de liderazgo dijo el domingo que el resultado final se anunciaría en septiembre.
La ministra de Comercio, Penny Mordaunt, declaró oficialmente su candidatura el domingo, uniéndose al secretario de Transporte, Grant Shapps; al ministro de Finanzas, Nadhim Zahawi, y a los ex ministros Jeremy Hunt y Sajid Javid, que anunciaron sus postulaciones a tiempo para aparecer en los periódicos del domingo, lo que eleva el total de contendiente a nueve.
«Este es un punto de inflexión crítico para nuestro país. Creo que un gobierno de coalición socialista o liderado por socialistas en las próximas elecciones sería un desastre para el Reino Unido», indicó Mordaunt en un comunicado y agregó que deban «ganar las próximas elecciones».
El Comité de legisladores 1922 del Partido Conservador, que establece las normas del partido en el Parlamento, fijará el calendario exacto tras una reunión el lunes.
Bob Blackman, miembro de la ejecutiva del Comité 1922, dijo que las candidaturas se cerrarán el martes por la noche, y que a continuación se llevará a cabo un proceso para reducir los candidatos a los dos últimos antes del 21 de julio.
Los miembros del partido elegirán un nuevo líder durante el verano, que se convertirá en primer ministro.
«El 21 de julio seleccionaremos a los dos últimos candidatos, para que los miembros del partido tengan tiempo suficiente para celebrar sesiones de votación y un voto por correo que permita elegir a un nuevo líder el 5 de septiembre», indicó a Sky News.
Al entrar en la carrera, Shapps, Zahawi, Hunt y Javid prometieron recortes de impuestos, lo que les enfrentó al actual favorito, el exministro de Finanzas Rishi Sunak, cuyo presupuesto del año pasado puso a Gran Bretaña en camino de su mayor presión fiscal desde la década de 1950. (Reuters)