La administración de Daniel Ortega, que en noviembre busca su cuarto mandato consecutivo en unos polémicos comicios presidenciales, está en la mira de la comunidad internacional tras las recientes detenciones de varios opositores, entre ellos algunos aspirantes a la contienda política.
De acuerdo con el diario oficial, el Ministerio de Gobernación suspendió la inscripción de la danesa Oxfam Ibis, la española Fundación Oxfam Intermon y los estadounidenses Instituto Nacional Demócrata para Asuntos Internacionales e Instituto Republicano Internacional.
El Gobierno, que también incluyó en la lista a Helping Hands The Warren William Pagel, M.D. Foundation, de Estados Unidos, y la sueca Diakonia, consideró que las ONG «han incumplido sus obligaciones conforme a las leyes de la materia que regulan a los organismos sin fines de lucro».
Las organizaciones son señaladas de no firmar convenios donde se defina su fuente del financiamiento y su cartera de proyectos, y de no entregar sus balances financieros. Representantes en Nicaragua de las ONG no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios por parte de Reuters.
El gobierno también ha cancelado el registro de ONG locales críticas con Ortega, que trabajaban en temas de derechos humanos e institucionalidad y reciben financiamiento de varios de los organismos extranjeros cuyas licencias fueron canceladas el lunes.
A raíz de la detención de líderes opositores, Canadá y Estados Unidos sancionaron a funcionarios de alto rango del gobierno de Nicaragua, que el fin de semana detuvo al gerente del diario La Prensa, él último que circulaba en papel y cuyas instalaciones fueron allanadas por la policía.
La coyuntura interna en el país centroamericano también ha tensado las relaciones diplomáticas entre la administración de Ortega, un exguerrillero de 75 años, y las de Argentina, Colombia, Costa Rica, España y México. (Reuters)