Tal y como ha señalado en un comunicado, se produjo un enfrentamiento durante la operación, lo que dejó «ocho criminales heridos que posteriormente perecieron debido a la gravedad de las heridas».
El objetivo de la operación era detener a varios narcotraficantes de Jacarezinho. Como consecuencia, se han incautado cinco fusiles y tres pistolas, además de catorce granadas y 72 kilos de medicamentos.
La favela fue tomada hace varias semanas por la Policía en el marco del nuevo programa del Gobierno para incrementar la seguridad en la zona.
Las autoridades han ordenado el cierre de una decena de escuelas por precaución, mientras que los vecinos han denunciado que se han registrado enfrentamientos y temen salir de sus viviendas.
El secretario de la Policía Militar, el coronel Luiz Henrique Marinho, señaló que las acciones llevadas a cabo son el resultado del trabajo de Inteligencia realizado recientemente. «Es una operación integrada entre la Policía Militar y la Policía Federal de Carreteras, además de un trabajo de Inteligencia que se llevó a cabo durante unos meses. La información que teníamos era que miembros de una gran facción estaban escondidos», ha explicado.
Según ha indicado, el operativo buscaba actuar con seguridad y minimizar riesgos. «Encontramos una gran resistencia para avanzar y cumplir nuestros objetivos, y probablemente estos elementos estaban en esa resistencia», indicó en relación con los fallecidos.
La semana pasada, el Tribunal Supremo Federal (STF) ordenó al Gobierno de Río de Janeiro adoptar medidas para reducir la letalidad de las acciones policiales en comunidades del estado y dio un plazo de 90 días para la presentación de un plan. (Europa Press)