«Desde las 4.00 horas del 24 de febrero, cuando comenzó el ataque armado de la Federación Rusa contra Ucrania, hasta las 0.00 horas del 26 de marzo, el Alto Comisionado ha registrado 2.909 bajas civiles en Ucrania: 1.119 muertos y 1.790 heridos», según el informe.
Los fallecidos han sido identificados como 224 hombres, 168 mujeres, 32 niños y 15 niñas, así como 52 niños y 628 adultos pendientes de identificación. Los heridos han sido identificados como 201 hombres, 150 mujeres, 32 niñas y 24 niños, así como 70 niños y 1.313 adultos pendientes de identificación.
Por zonas de control, Naciones Unidas estima 1.060 muertos y 1.527 heridos en territorio todavía controlado por el Gobierno ucraniano, contando los 301 muertos y 694 heridos en las zonas bajo su control de las disputadas regiones de Donetsk y Lugansk, en el este del país. En el área bajo control de las milicias de estas autoproclamadas repúblicas, la ONU ha constatado 286 bajas (59 muertos y 227 heridos).
Naciones Unidas apunta que la mayoría de las bajas civiles fueron causadas por el uso de armas explosivas de «amplia área de impacto», a través de artillería pesada, el uso de plataformas de cohetes, así como ataques aéreos.
La ONU apunta que las cifras reales «son considerablemente más altas, especialmente en el territorio controlado por el Gobierno y especialmente en los últimos días», debido a que falta información de algunos lugares donde se han producido intensas hostilidades y muchos detalles de las bajas «aún están pendientes de corroboración».
Naciones Unidas también «toma nota» del informe de la Fiscalía General de Ucrania, según el cual hasta las 8.00 (hora local) del 26 de marzo, 139 niños habían muerto y 205 habían resultado heridos.
La ONU también reconoce la existencia de un informe de la Policía Nacional de la región de Járkov, según el cual a las 18.00 horas (hora local) del 25 de marzo, el número total de víctimas civiles en la región de Járkov era de 323 civiles muertos, entre ellos 15 niños. (Europa Press)