Reino Unido se convierte así en la primera potencia occidental en suministrar a Kiev tanques de batalla de primera línea, un momento destacado en el historial de ayuda militar a Ucrania a pesar de los temores existentes en el seno de la OTAN a una espiral de hostilidades.
En una llamada telefónica realizada ayer, Sunak confirmó la intención de intensificar el apoyo británico a Ucrania, incluso mediante el suministro de tanques Challenger 2 y sistemas de artillería adicionales.
El primer ministro y el presidente Zelenski acogieron con beneplácito otros compromisos internacionales en este sentido, incluida la oferta de Polonia de proporcionar una compañía de tanques Leopard.
Aunque el comunicado de Downing Street no precisa el número exacto de tanques, fuentes del Gobierno habían informado previamente de que existía la intención de enviar al menos cuatro tanques de inmediato y ocho más en un futuro próximo.
En respuesta, el presidente de Ucrania aplaudió la decisión y agradecido el siempre contundente respaldo de Reino Unido, que ahora se convirtió en impenetrable.
El jefe de la oficina de Presidencia, Andrei Yermak, también aplaudió el envío: “Gracias por proporcionarnos un nuevo paquete de defensa para combatir contra al enemigo. Se trata de una importante contribución a la defensa de la libertad y la democracia en Europa”, dio a conocer, como Zelenski, a través de su cuenta de Twitter.
Como contraparte, la Embajada de Rusia lamentó la decisión. “Reino Unido parece tener la intención de reafirmar su estatus como líder de la OTAN en términos de armar a Kiev y escalar el conflicto”, protestó.
“Aquellos británicos que están cansados de la guerra y albergan un deseo de paz se llevan hoy una desilusión: no se puede apagar un fuego con gasolina”, mencionó Rusia.
“La presencia de tanques en zona de conflicto”, añade, “sólo servirá para intensificar las operaciones de combate, lo que generará más bajas, incluso entre la población civil”. La embajada cree que, esta situación, “irónicamente, se ajusta por completo a los objetivos de Londres de prolongar el conflicto”.