El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo que “estamos resolviendo” el tema con Estados Unidos. El mandatario ha advertido que no asistirá a la Cumbre si no son invitadas todas las naciones de la región.
A finales de abril, un funcionario de alto rango del Departamento de Estado estadounidense dijo que seguramente Cuba, Nicaragua y el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela no serían invitados, al destacar que la Cumbre se enfocará en los gobiernos democráticos del Hemisferio Occidental.
“Nadie tiene derecho, por más poderoso que sea, a maltratar a un país por más pequeño que sea porque todas las naciones son libres, son independientes, son soberanas”, dijo López Obrador durante un discurso en un evento en el norte de México.
“No hay ninguna nación que pueda colocase como la que gobierna el mundo, ninguna, ni Rusia, ni China ni Estados Unidos. Todos somos iguales”, subrayó.
A las críticas de México se han sumado Argentina, Chile, Honduras y Bolivia. El presidente nicaragüense, Daniel Ortega, dijo esta semana que “no le interesa” asistir a la Cumbre, tras haberse informado al país centroamericano su exclusión del encuentro, según una fuente.
Funcionarios del gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, están considerando invitar a un representante cubano a la Cumbre de las Américas, de acuerdo con una persona familiarizada con el asunto que, dijo, la discusión al respecto se ha centrado en permitir una presencia por debajo del nivel del presidente o canciller, aunque aún no se ha tomado una decisión (Reuters)