El texto, que todavía debe ser aprobado por los líderes antes de su publicación oficial al término de la reunión multilateral hoy, también pide prorrogar el acuerdo para exportar granos ucranianos y juzga inadmisible el uso de armas nucleares o las amenazas de recurrir a ella.
Una mayoría de los países miembros del G20 condena con firmeza la invasión rusa a Ucrania y destaca sus devastadoras consecuencias humanas para la economía global, según el borrador de la declaración conjunta cuya aprobación está prevista en la cumbre que se celebra en Bali.
El texto, en principio aceptado preliminarmente por todos los miembros del grupo incluida Rusia, también pide prorrogar el acuerdo para exportar granos ucranianos y juzga inadmisible el uso de armas nucleares o las amenazas de recurrir a ellas.
El documento destaca el inmenso sufrimiento humano y los problemas que acarrea a escala global en cuanto a suministro energético, seguridad alimentaria o riesgos para la inestabilidad financiera, aunque también se hace eco de las diferentes posturas al respecto entre los veinte países.
Los casi nueve meses de invasión rusa sobre Ucrania causaron un desastroso aumento de los precios de los alimentos y la energía a nivel mundial, empobreciendo a millones de personas y extendiendo la sombra de una hambruna.
Ucrania es uno de los principales productores de cereales del mundo, pero tuvo hasta 20 millones de toneladas de granos bloqueados en sus puertos a raíz de la invasión de Rusia. Un acuerdo alcanzado en julio con la intervención de la ONU y Turquía permitió reanudar las exportaciones, pero este pacto expira el 19 de noviembre y el borrador del comunicado pide su extensión.
El comunicado reconoce que hubo otros puntos de vista y que el “G20 no es el foro para resolver asuntos de seguridad, pero sus miembros reconocen que estas cuestiones tienen consecuencias significativas para la economía global.
El comunicado que debe ser consensuado aún por los líderes del G20 entre la sesión de hoy va en línea con lo que adelantaron representantes de la Unión Europea y de Estados Unidos, promotores de una condena clara y firme a Moscú en este foro.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, destacó ayer que el texto final en el que aún trabajan las delegaciones del G20 va en la dirección correcta para condenar la invasión rusa de Ucrania pese a las diferentes posturas entre sus miembros.
“El hecho de haber llegado a un acuerdo a nivel de delegaciones es ya un gran logro”, dijo Michel, poco antes del arranque de la cumbre del G20, “una de las más difíciles que existió nunca” , según afirmó.
Ninguna reunión ministerial del G20 desde que Rusia invadió Ucrania en febrero de este año logró un documento consensuado por las diferencias entre los miembros a la hora de incluir alusiones al conflicto y en qué términos hacerlo.
Rusia se refiere de forma oficial a su invasión de Ucrania como una operación militar especial, lo que dificultaba que hubiera una simple mención a la guerra en Ucrania en declaraciones multilaterales.
Por ello algunos integrantes del G20 pusieron sobre la mesa alternativas más ambiguas como conflicto armado, que rechazaban de pleno la mayoría de países, según señalaron fuentes diplomáticas occidentales. (Infobae).