Ahora las fuerzas rusas se limitan a misiones de reconocimiento aéreo y de sabotaje para dificultar la ofensiva ucraniana, según Kiev. En concreto lanzaron 16 proyectiles y se han bombardeado tres posiciones en territorio ucraniano que han afectado a 15 localidades como Dergachi, Kramatorsk, Kostiantinivka, Dnipro, Voznesensk y Nikolaev.
También en la región de Sumi ha habido bombardeos rusos con carros de combate, morteros, artillería y cohetes contra insfraestructuras de Seredyna-Buda, Bachivsk, Yastrubivka y Maiske.
Mientras, en la región de Kramatorsk las bombas rusas alcanzaron Bogorodichne, Raihorodok, Hrihorivka, Nikolaivka, Kriva Luka, Siversk, Zvanivka, Ivano-Daryivka, Spirne y Rozdolivka. Igualmente ha habido ataques en la región de Bajmut, Avdiivsk, Novopavlivsk, Zaporiyia, Buz Sur y Novaya Kajovka.
Así, unos 150 militares rusos han partido desde Borshcheva y Artemivka, en la región de Jarkov, en dos autobuses, un camión y 19 coches “robados”, dejando atrás importantes suministros y material, según Kiev. Allí habrían dejado cuatro camiones Kamaz y 20 vehículos blindados Tiger.
Mioentras, en la localidad de Nova Kajovka fue evacuado un hospital para poder utilizar este edificio como base militar, según Kiev.
Hasta 52.650 militares rusos han muerto en Ucrania desde el inicio de la invasión, el pasado 24 de febrero, según el balance oficial del Gobierno ucraniano. En las últimas 24 horas se han sumado 400 militares rusos.(Europa Press)