Tras 100 días de guerra en Ucrania, los equipos de salud mental de MSF han advertido de que existen “preocupantes” síntomas de problemas psicológicos por parte de la población.
“Muchos de los niños y niñas que hemos visto y que han experimentado la explosión de una bomba padecen insomnio, se orinan en la cama y tienen pesadillas”, ha afirma Oksana Vijivska, supervisora de salud mental de MSF en Kiev. “Las personas mayores, que a menudo se encuentran solas tras verse separadas de sus seres queridos, están en constante ansiedad y rompen a llorar”, ha advertido.
Vira, una mujer que huyó de la región de Donetsk y ahora busca refugio en Ivano-Frankivsk, en el suroeste del país, ha dicho sentir “miedo en el alma”. “Mis dedos y mis manos empiezan a enfriarse”, ha dicho.
“Estoy preocupada por mis familiares, que siguen en casa; por mi hijo, que sigue viviendo donde hay combates. No siento pena, lo que siento está dentro de mí, en lo más profundo de mi alma y me hace llorar de inmediato. No puedo describir cómo es”, ha matizado.
Los equipos de MSF han ofrecido atención a personas desplazadas en Beregovo, Járkov, Chernígov, Vinnytsia, Ivano-Frankivsk, Úzhgorod, Kropinitski, Dnipró y Zaporiyia.
Así, la organización ha denunciado que muchas de estas personas se encuentran “aisladas” y en situaciones vulnerables, como las personas mayores. Otras han sido separadas de sus vecinos y familiares, que formaban una red de apoyo.
“Uno de los problemas que tratamos es el estrés relacionado con el trauma; por ejemplo, los recuerdos de las personas que se esconden en los sótanos durante los intensos bombardeos pueden desencadenarse por palabras, sonidos, olores o escenas que recuerdan el trauma original”, ha explicado Vijivska, que ha indicado que “también hay personas con muchos síntomas relacionados con la ansiedad, como insomnio y preocupación constante por el futuro”.
La ONG ha explicado que, la mayoría de las veces los psicólogos tratan de “estabilizar a los pacientes identificando los problemas a los que se enfrentan y posteriormente les ayudan a encontrar mecanismos para afrontarlos”.
“Intentamos ayudar a nuestros pacientes a recuperar cierto nivel de control en una situación muy imprevisible e incierta apoyándoles a comprender y expresar lo que sienten. Intentamos tranquilizarles diciéndoles que el estrés, el miedo, la ansiedad y el insomnio son reacciones normales ante esta situación anormal”, ha aseverado la psicóloga Lina Villa.
Por ello, ha matizado, es “de vital importancia que las personas puedan expresar sus sentimientos y emociones tras enfrentarse a situaciones traumáticas”. El psicólogo Valeri Kucheriaviy, que trabaja con MSF en Beregovo, ha aseverado que “Muchos tienen problemas para dormir y algunos han empezado a tartamudear”.
Vijivska ha insistido en que “es necesario un incremento urgente de los servicios de salud mental en todo el país” y ha hecho un llamamiento para que “tanto el sistema nacional de salud como otras organizaciones garanticen que la respuesta a estas necesidades (…) respaldan lleguen a las personas más vulnerables, especialmente en las zonas rurales”. (Europa Press)