«Más de 200 terroristas murieron en ataques aéreos, siendo la mayoría de ellos altos cargos de Estado Islámico», señaló el portavoz del Mando de Operaciones Conjuntas, Tahsin al Jafaji, en declaraciones a los medios de cmunicación.
De esta manera también especificó que los integrantes del grupo yihadista que siguen operativos son iraquíes, sin dar más detalles. Estado Islámico perpetró varios ataques en las últimas semanas que dejaron más de una decena de militares fallecidos en un repunte de sus actividades.
Por otro lado el jefe de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), Mazlum Abdi, advirtió que el grupo yihadista está acometiendo peligrosos preparativos en la ciudad siria de Raqqa (norte), luego de la muerte de seis miembros de las FDS en un ataque perpetrado.
«Los movimientos de los terroristas coinciden con las amenazas de Turquía sobre atacar la seguridad y la estabilidad de la región», manifestó a través de su cuenta en la red social Twitter. «Información recibida desde Raqqa apunta a peligrosos preparativos por parte de Estado Islámico”, concluyó.
Las FDS suspendieron temporalmente las operaciones conjuntas con Estados Unidos contra Estado Islámico a causa de los bombardeos turcos contra sus posiciones. Turquía lanzó el 21 de noviembre la operación Garra Espada, una campaña de bombardeos contra grupos kurdos tras el atentado con bomba perpetrado el 13 de noviembre en la ciudad turca de Estambul, que dejó seis muertos y más de 80 heridos.
El Gobierno turco acusó del atentado en Estambul al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y señaló que la principal sospechosa había recibido órdenes de la milicia kurdo-siria Unidades de Protección Popular (YPG), principal elemento de las FDS, si bien tanto el PKK como las FDS se desvincularon del ataque. (Europa Press).