«El terrorismo, en todas sus formas y manifestaciones, constituye una de las amenazas más graves a la paz y la seguridad internacionales», expuso el principal órgano ejecutivo de la ONU en un comunicado que implica el consenso de sus 15 Estados miembro.
El Consejo denunció que «cualquier acción terrorista es criminal e injustificable», pero cree que «atacar deliberadamente a civiles y al personal que colabora en la evacuación de civiles es especialmente atroz».
En este sentido, confía en que «autores, organizadores, financiadores y patrocinadores» del doble atentado, que se saldó con unas cien víctimas mortales, rindan cuentas por sus actos, para lo cual ha instado a todos los países que a colaborar «activamente».
Los miembros del Consejo también han subrayado «la importancia de combatir el terrorismo en Afganistán para garantizar que su territorio no sea usado para amenazar o atacar ningún país», lo que pasa también por «ningún grupo o individuo» respalde este tipo de actividades, reza la nota, que se hace eco de la reivindicación asumida por la filial de Estado Islámico en relación al último ataque. (Europa Press)