París.- Los presidentes de Francia, Emmanuel Macron, y de China, Xi Jinping, pidieron ayer la “urgencia” de lograr un alto el fuego en Ucrania. Los mandatarios sostuvieron una conversación telefónica y hablaron de la “dramática” situación de la población civil en Kiev.
Macron aprovechó para tratar con Xi la situación ucraniana tras la «agresión rusa», que Pekín siempre evitó condenar directamente. De hecho, varios mandatarios occidentales han reclamado sin éxito al dirigente chino que interceda ante Moscú para mejorar la situación sobre el terreno.
Xi y Macron sí coinciden, no obstante, en su defensa de “la integridad territorial y de la soberanía de Ucrania” y en la necesidad de aumentar la ayuda humanitaria. Además, han hablado del riesgo de crisis alimentaria global derivada del conflicto, según una nota del Elíseo.
Al margen de Ucrania, Xi felicitó a Macron por su reciente reelección y ha apostado por «profundizar» las relaciones bilaterales. El presidente galo, por su parte, cree que es momento de un «reequilibrio» entre las relaciones de China y la UA, con «una mayor reciprocidad».
En materia de Derechos Humanos, Macron aplaudió la ratificación por parte de las autoridades chinas de varios acuerdos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre el trabajo forzado, pero ha recordado que deben ponerse en práctica «plenamente» en todo el territorio, incluida la región de Xinjiang.
Macron reconoció también la escalada de casos de covid-19 en China, que aplica duras restricciones en grandes ciudades como Shanghái y Pekín, pero al mismo tiempo ha llamado a tener en cuenta ciertas «preocupaciones», entre ellas la necesidad de autorizar los traslados al aeropuerto o de no separar a los niños de sus padres «en ninguna circunstancia». (Europa Press)