El Gobierno argentino dijo más temprano que había alcanzado un acuerdo con el FMI después de largas y arduas negociaciones para reestructurar pagos derivados de un préstamo récord por 57.000 millones de dólares de 2018, que no logró evitar una crisis económica y monetaria en el país.
«El personal del FMI y las autoridades argentinas acordaron una senda de consolidación fiscal que será un ancla del programa», dijo el organismo en un comunicado. «La senda fiscal acordada mejoraría de forma gradual y sostenible las finanzas públicas y reduciría la financiación monetaria», agregó.
El FMI dijo que el camino fiscal acordado permitirá a Argentina incrementar el gasto en infraestructura, ciencia y tecnología y protegerá programas sociales previstos.
Pero el organismo y las autoridades argentinas acordaron que una estrategia para reducir los subsidios a la energía «de manera progresiva» era esencial para mejorar el gasto del gobierno.
El acuerdo también pide un cambio en la política monetaria para «tener tasas de interés reales positivas en apoyo del financiamiento interno y fortalecimiento de estabilidad».
Además, el FMI dijo que trabajará con el gobierno argentino para alcanzar un acuerdo a nivel de equipos que pueda ser considerado para la aprobación del comité ejecutivo del FMI. (Reuters)