El Grupo de Contacto para Ucrania, que integran aliados occidentales de Kiev, se reunieron ayer en la base estadounidense de Ramstein (Alemania) para un encuentro ministerial centrado en la demanda de mayor apoyo militar a ese país frente a Rusia, incluido el suministro de tanques Leopard.
A la reunión acudieron el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, y el ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, así como a sus homólogos de Alemania, Reino Unido y Polonia, entre otros.
La cita fue precedida por el reclamo de Kiev a sus aliados para que refuercen considerablemente los suministros de armamento, incluidos los “Leopard” de fabricación alemana, expresada en un comunicado conjunto de Reznikov junto con el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro kuleba.
El texto agradecía explícitamente la decisión del Reino Unido de transferir un escuadrón de blindados Chanllenger 2, aunque advertía que este aporte no es suficiente frente a la ventaja cuantitativa sustancial en tropas, armamento y equipos de Rusia.
Kiev llamó a los Estados que disponen de Leopard 2 a sumarse a dichos suministro y enumeraba a Alemania, Canadá, España, Dinamarca, Finlandia, Grecia, Noruega, Polonia, Suecia y Turquía, entre otros.
La demanda de Kiev se produce en medio de fuertes presiones a Berlín, incluido desde aliados como Polonia, para que autorice los envíos de Leopard a los aliados que disponen de este tipo de tanques.
Todo suministro de esos blindados, de fabricación alemana, precisa la autorización de Berlín.
En una entrevista el propio presidente Volodímir Zelensky insistía en su demanda: “Vosotros podéis seguir hablando durante seis meses de ello, pero en mi país cada día mueren personas”, afirmó el líder ucraniano.
“Si disponéis de Leopards, dádnoslos”, insistió Zelensky, para rechazar la argumentación del gobierno alemán de que no se adoptará una decisión en solitario, sino en consenso con sus aliados: “Los ‘Leopard’ no circularán por la Federación Rusa. Son para defendernos”, afirmó.
Alemania se negó hasta ahora a autorizar el envío de estos carros de combate en activo en otros países de la OTAN y afirmó que tal decisión solo puede adoptarse “en coordinación” con los aliados.
En medios alemanes se avanzó que podría levantar este veto si Estados Unidos permite el envío de sus tanques Abrams, algo complejo, ya que éstos requieren más entrenamiento y apoyo que los Leopard. Desde el Pentágono se rechazó tal envío, entre otras cosas porque los Abrams necesitan combustible para aviones, del que Ucrania no dispone.
La cuestión pesa sobre el nuevo ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, quien accedió al cargo y mantuvo de inmediato una primera reunión con su homólogo estadounidense Austin.
A las presiones desde Ucrania se sumaron las demandas expresadas en una reunión previa en Estonia entre ministros o altos funcionarios de Defensa de diez países de la OTAN, que se pronunciaron por el envío a Kiev de más armamento pesado, incluidos tanques. (Infobae).