Atenas/Londres.- Estados Unidos ha confiscado un cargamento de petróleo iraní retenido a bordo de un barco operado por Rusia cerca de Grecia y enviará el cargamento a Estados Unidos a bordo de otro buque, según diferentes fuentes.
No estaba claro si el cargamento se confiscó porque era petróleo iraní o debido a las sanciones impuestas al petrolero por su nexo con Rusia. Irán y Rusia se enfrentan a sanciones estadounidenses por separado.
El buque de bandera iraní, el Pegas, fue uno de los cinco buques designados por Washington el 22 de febrero «dos días antes de la invasión rusa de Ucrania» por las sanciones impuestas al Promsvyazbank, un banco considerado fundamental para el sector de la defensa de Rusia.
El propietario ruso del buque, Transmorflot, fue designado posteriormente el 8 de mayo. El petrolero, rebautizado como Lana el 1 de marzo y con bandera iraní desde el 1 de mayo, ha permanecido cerca de aguas griegas desde entonces. Anteriormente tenía bandera rusa.
Una fuente del Ministerio de Transportes griego declaró ayer que el Departamento de Justicia de Estados Unidos había “informado a Grecia de que la carga del buque es petróleo iraní”.
“La carga ha sido transferida a otro barco que fue contratado por Estados Unidos”, añadió la fuente, sin dar más detalles.
Estados Unidos impuso el miércoles sanciones a lo que describió como una red de contrabando de petróleo y lavado de dinero respaldada por Rusia para la Fuerza Quds de los Guardias Revolucionarios de Irán, incluso mientras Washington intenta revivir un acuerdo nuclear con Irán.
Los responsables estadounidenses y rusos no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
La confiscación fue confirmada por otra fuente occidental familiarizada con el asunto, que añadió que el cargamento fue transferido al buque cisterna con bandera de Liberia Ice Energy, operado por la compañía naviera griega Dynacom.
Una fuente de Dynacom confirmó que “la transferencia del petróleo estaba en curso desde el buque al Ice Energy de Dynacom, que luego navegará hacia Estados Unidos”.
La agencia estatal de noticias iraní IRNA informó de que su Ministerio de Asuntos Exteriores convocó al encargado de negocios de la embajada de Grecia en Teherán tras la incautación de la carga de un barco que estaba “bajo la bandera de la República Islámica de Irán en aguas griegas y se le informó de las rotundas objeciones” del Gobierno de Irán.
Las autoridades del Gobierno griego no pudieron confirmar la información.
Según IRNA, la Organización Marítima y Portuaria de Irán dijo que el petrolero había buscado refugio en la costa griega tras experimentar problemas técnicos y mal tiempo, y añadió que la incautación de su carga era “un claro ejemplo de piratería”.
El Ice Energy informó ayer de su posición como anclado cerca de la isla meridional griega de Evia, según mostraron los datos de seguimiento de buques en Eikon.
En 2020, Washington confiscó cuatro cargamentos de combustible iraní a bordo de buques extranjeros que tenían como destino Venezuela y los transfirió, con la ayuda de socios extranjeros no revelados, a otros dos buques que luego navegaron hacia Estados Unidos.
Estas incautaciones se produjeron después de que un tribunal de distrito estadounidense emitiera una orden para los cargamentos en un caso de confiscación civil.
Las autoridades griegas confiscaron el mes pasado el Pegas, con 19 tripulantes rusos a bordo, cerca de la costa de la isla de Eubea.
Dijeron que el barco fue incautado como parte de las sanciones de la UE a Rusia por la invasión de Ucrania. Sin embargo, el buque fue liberado posteriormente debido a la confusión sobre las sanciones impuestas a sus propietarios.
El grupo de defensa estadounidense United Against Nuclear Iran (UANI), que vigila el tráfico de petroleros relacionados con Irán, dijo que el Pegas había cargado unos 700.000 barriles de crudo desde la isla iraní de Sirri el 19 de agosto de 2021.
Antes de esta carga, el Pegas transportó más de tres millones de barriles de petróleo iraní en 2021, de los cuales más de 2,6 millones acabaron en China, según el análisis de la UANI.
El Gobierno del presidente Joe Biden ha estado participando en conversaciones indirectas para reactivar un acuerdo nuclear con Irán de 2015 que el expresidente Donald Trump abandonó, bajo el cual las potencias mundiales habían levantado las sanciones financieras internacionales a Teherán a cambio de restricciones a su programa nuclear.
Aunque las conversaciones parecían estar cerca de resucitar el acuerdo en marzo, se estancaron por las demandas rusas de última hora y por la posibilidad de que Washington retirara a los Guardias Revolucionarios de su lista de terrorismo. (Reuters)