“Los problemas (de producción) continúan, afectando la evolución del PIB minero”, aseguró Adrián Armas.
Perú es el segundo productor mundial de cobre y la minería es una fuente clave de sus ingresos fiscales.
El país enfrenta una ola de protestas de comunidades indígenas que acusan a las empresas mineras de no proporcionar suficientes empleos y beneficios a los empobrecidos habitantes.
Solo Las Bambas representa alrededor del 1 % del Producto Interno Bruto y el 2 % del oferta mundial de cobre.
En un momento en que pierde ingresos fiscales mientras los precios del cobre están cerca de niveles récord, Perú también enfrenta una alta inflación y presiones para subsidiar los costos que se han disparado desde la invasión de Rusia a Ucrania.
El banco central elevó su tasa de interés de referencia al 4,5 % desde el 4 %, citando presiones inflacionarias.
Armas dijo que el banco esperaba que la inflación comience a desacelerarse a partir de julio, alcanzando su rango objetivo de 1 % – 3 % en el segundo o tercer trimestre del próximo año.
El país ya eliminó la mayoría de los impuestos sobre la gasolina y los alimentos esenciales, y entregó cupones a las familias pobres para comprar gas para cocinar. (Reuters)