Entre los afectados, detalla el comunicado emitido por el Departamento de Estado, hay funcionarios del Ministerio de Interior e integrantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias por las supuestas acciones represivas ejercidas «contra manifestantes pacíficos» el pasado 15 de noviembre.
«En los días anteriores al 15 de noviembre, el régimen cubano intimidó a activistas con turbas patrocinadas por el Gobierno, confinó a periodistas y miembros de la oposición en sus hogares, revocó las credenciales de los periodistas para reprimir la libertad de prensa y detuvo arbitrariamente a ciudadanos cubanos que intentaron protestar pacíficamente», ha acusado el escrito de Washington.
Según la oficina que dirige el secretario, Antony Blinken, estas nueve personas «negaron» a los cubanos «derechos universales», como de libertad de expresión y de reunión pacífica.
«Estas restricciones de visado van en sintonía con nuestra misión de apoyar al pueblo cubano y promover que no solo de los líderes del régimen rindan cuentas, sino también a aquellos funcionarios que permiten estos ataques la democracia y los Derechos Humanos», contó el comunicado.
Por último, Estados Unidos ha amenazado con seguir utilizando todas las «herramientas diplomáticas y económicas» de las que dispone para conseguir la puesta en libertad de «los presos políticos» y apoyar «los reclamos» del pueblo cubano a mayores libertades y rendición de cuentas. (Europa Press)