Un funcionario israelí confirmó detallando que el entonces primer ministro Yair Lapid dio el visto bueno la transferencia, aunque Estados Unidos no necesita formalmente tal consentimiento.
Durante décadas, el Pentágono almacenó municiones en Israel que sirve como reabastecimiento de emergencia para el país en tiempos de guerra o para su entrega a otros aliados de Estados Unidos.
Las municiones que Washington decidió trasladar de Israel a Ucrania son unos 300.000 proyectiles de artillería de 155 milímetros. Alrededor de la mitad se envió a Europa para su redistribución a Ucrania.
Analistas militares destacaron que la artillería constituye la columna vertebral de la potencia de fuego de combate terrestre tanto para Ucrania como para Rusia, y el resultado de la guerra puede depender de qué bando se quede antes sin munición.
Consultado por el informe, un portavoz militar israelí se limitó a decir: “El material estadounidense que estaba almacenado en Israel fue transferido a las fuerzas armadas de Estados Unidos hace unas semanas a petición de éstas”.
Si tales transferencias se produjeron o se producirán bajo la vigilancia del primer ministro conservador israelí Benjamin Netanyahu, que recuperó la jefatura del Estado el 29 de diciembre, podría poner a prueba la compenetración que construyó con el presidente ruso Vladimir Putin en mandatos anteriores.
Netanyahu habló de revisar la política israelí sobre la guerra entre Ucrania y Rusia, pero no prometió ningún suministro directo de armas a Kiev. Lapid, un centrista que fue primer ministro durante seis meses, expresó su solidaridad con Ucrania.
La embajada de Estados Unidos en Israel no hizo comentarios inmediatos sobre el informe. El embajador ucraniano, Yevgen Korniychuk, dijo que no tenía ni idea de si el informe era cierto. La embajada rusa declinó hacer comentarios.
Por su parte, un medio de comunicación indicó que una fuente de las Fuerzas de Defensa de Israel aseguró que EEUU repondrá las armas transferidas a Ucrania y aclaró que el envío no significa un cambio en la política israelí a la hora de proporcionar ayuda militar a Ucrania.
Aunque Israel condenó la invasión rusa de Ucrania, limitó su asistencia a Kiev a ayuda humanitaria y equipos de protección.
Los israelíes quieren mantener una línea directa de coordinación con Rusia, establecida en 2015, sobre sus ataques militares contra presuntos objetivos iraníes en Siria, donde Moscú tiene una guarnición. También tienen presente el bienestar de la gran comunidad judía de Rusia.
Aunque las municiones estadounidenses almacenadas en Israel están bajo su custodia, “los estadounidenses no necesitan nuestro permiso para trasladarlas. Son propiedad estadounidense”, declaró David Ivry, ex director general del Ministerio de Defensa de Israel. (Infobae)