El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, detalló que hasta la fecha se confirmaron 8.006 civiles muertos y 13.287 heridos, si bien advirtió que estos datos son sólo la punta del iceberg.
Las cifras revelan que el 61,1 por ciento de las víctimas civiles son hombres, mientras que el 39,9 por ciento son mujeres. Asimismo, muestran que al menos 487 niños murieron y 954 resultaron heridos desde el inicio de los combates.
La oficina de Turk detalló que el 90,3 por ciento de las víctimas civiles fueron causadas por armas explosivas con efectos amplios, incluidos proyectiles de artillería, misiles de crucero, misiles balísticos y bombardeos, la mayoría de los cuales fueron ejecutados contra zonas pobladas. Por otra parte, 219 civiles murieron y 413 resultaron heridos por minas y otros artefactos explosivos.
Por otra parte, confirmaron haber recibido información sobre seis muertos y 15 heridos en la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014, mientras que muchos informes sobre víctimas están a la espera de verificación en las regiones ocupadas de Ucrania, principalmente en Mariúpol, Lisichansk, Popasna y Severodonetsk.
La oficina indicó además que cuenta con información sobre 30 muertos y 130 heridos en territorio ruso, si bien estas cifras no fueron incluidos en el balance debido a que están igualmente a la espera de ser corroboradas.
Así, Turk, recalcó que las cifras revelan las pérdidas y sufrimiento causados a la población desde el inicio del ataque armado ruso el 24 de febrero del año pasado. “Los daños causados a los civiles son insoportable. En medio de escasez de electricidad y agua durante los fríos meses de invierno, cerca de 18 millones de personas necesitan urgentemente ayuda humanitaria”, ha resaltado.
Asimismo, recordó que alrededor de catorce millones de personas se vieron desplazadas de sus hogares e incidió en que se vieron afectados desde jóvenes hasta ancianos.
“INTENSIFICAR” LOS ESFUERZOS PARA LA RENDICIÓN DE CUENTAS
Turk denunció además que se registran cada día violaciones del Derecho Humanitario y resaltó que cada vez es más difícil encontrar una forma de avanzar hacia la paz ante el creciente sufrimiento y destrucción.
Por ello, incidió en el devastador precio que los civiles a ambos lados del frente pagaron y siguen pagando y solicitó intensificar y profundizar los esfuerzos de cara a una rendición de cuentas y justicia por las violaciones del Derecho Internacional.
Por último, indicó que esta guerra sin sentido tuvo reverberaciones en todo el mundo, incluido el aumento de los precios de la comida y los combustibles, lo que incrementó la miseria a escala global, especialmente entre los que ya estaban en situación de vulnerabilidad. (Europa Press).