De los 57 escaños legislativos, 19 quedarían en manos del centrista Partido Liberación Nacional (PLN), liderado por el exmandatario José María Figueres, quien obtuvo un triunfo insuficiente para evitar el balotaje contra el economista Rodrigo Chaves.
La compleja composición legislativa será determinante para proyectos que permitan a Costa Rica cumplir con un acuerdo pactado hace un año con el Fondo Monetario Internacional (FMI), como salvavidas para las finanzas públicas tras el golpe de la pandemia sobre la economía.
La fragmentación, producto de la profusión de candidatos presidenciales, 25, se puede complicar por posibles divisiones internas ante falta de liderazgos, como ha ocurrido en la última década, dijo a Reuters el analista político y exdiputado Constantino Urcuyo, catedrático de la Universidad de Costa Rica.
«El escenario vuelve a dificultar la gobernabilidad y obligar al nuevo gobierno a buscar alianzas oportunas que le den las mayorías parciales en temas específicos», opinó.
Con el 88,20% de las urnas computadas, Figueres, quien gobernó durante 1994 y 1998, obtuvo el lunes el 27,26% de los votos, frente al 16,70% de Chaves, del centrista Partido Progreso Social Democrático (PPSD), que aventajaba en 34,357 votos al tercero.
En tanto, de acuerdo con el cómputo de las papeletas legislativas al 80%, el PPSD sería la tercera fuerza del Congreso, con nueve curules, una menos que el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC, centroderecha), que compitió contra Figueres y Chaves con la exvicepresidenta Lineth Saborío.
Con siete lugares, la cuarta bancada en tamaño sería Nueva República, agrupación de corte conservadora representada por el predicador evangélico Fabricio Alvarado, quien tiene asegurado su escaño a pesar de quedar fuera de la competencia por la presidencia.
La agrupación de izquierda Frente Amplio, del abogado José María Villalta, otro aspirante a gobernante que recibió 6,09% de la votación, y el Partido Liberal Progresista (PLP, derecha), que postuló al economista Eliécer Feinzaig, lograrían seis escaños.
Los diputados entrarán en funciones el 1 de mayo, un mes después de la fecha del balotaje y una semana antes de que asuman Figueres o Chaves a la silla presidencial que deja Carlos Alvarado, cuyo partido Acción Ciudadana (PAC), no logró ni un escaño. (Reuters)