Israel.- El Parlamento de Israel aprobó ayer su disolución y la convocatoria de elecciones anticipadas el 1 de noviembre, después de que la coalición gubernamental quedara debilitada por sus disputas internas y perdiera su escueta mayoría en la Knesset poco más de un año después de su creación.
La votación se ha saldado con 94 votos a favor y ninguno en contra tras un proceso que se ha extendido durante varios días, en medio de los intentos de la oposición, encabezada por el Likud del ex primer ministro Benjamin Netanyahu, para intentar ensamblar un nuevo Ejecutivo con los parlamentarios actuales.
Además, la decisión del Parlamento implica que el ministro de Exteriores, Yair Lapid, pasará en la medianoche de este jueves a ocupar el cargo de primer ministro, en el que sustituirá a Naftali Bennett, como parte del acuerdo de coalición.
Lapid permanecerá en el cargo hasta la celebración de las próximas elecciones, que serán las quintas en tres años y medio y a las que no será candidato el propio Bennett, líder del ultraderechista Yamina, quien el miércoles destacó que había optado por no concurrir a las urnas.
En una ceremonia celebrada horas después de la votación en la Knesset, Bennett ha traspasado oficialmente sus competencias a Lapid, quien continuará además como ministro de Exteriores. «Este papel especial y este país no pertenecen sólo a una persona, sino a todo el pueblo de Israel», ha dicho el primer ministro saliente.
«Te paso el bastón sagrado y la responsabilidad del Estado de Israel. Espero que lo protejas y que Dios te proteja», añadió. En respuesta, Lapid ha ensalzado a Bennett como «Una buena persona, un excelente primer ministro y un buen amigo».
Además, el próximo primer ministro israelí ha prometido «hacerlo lo mejor posible para un Estado judío, democrático, bueno y fuerte». «Ese es el trabajo y es mayor que todos nosotros», ha argüido. Lapid ha acudido a Yad Vashem, el Museo del Holocausto en Jerusalén, antes de la toma de posesión.
El presidente de la Knesset, Mickey Levy, lamentó tras la votación que el Parlamento haya estado «polarizado» y ha denunciado que el odio «ha alcanzado nuevas cotas» durante el mandato del gobierno de coalición, según ha recogido el diario ‘The Times of Israel’.
«Esta Knesset ha sido muy compleja. Ha sido una Knesset polarizada que ha operado durante un cambio de Gobierno y en la que la oposición se convirtió en una coalición y una coalición se convirtió en oposición», ha dicho. «Desafortunadamente, el discurso abusivo y el odio han alcanzado cotas que no conocíamos», zanjó.
En este sentido, Levy mostró su deseo de que «se aprenda de los errores» y «se aprenda a gestionar las disputas de una forma adecuada en la próxima Knesset». «No debemos continuar por este camino que podría acabar por desmantelar la Knesset y la capacidad para liderar el país», ha zanjado.
El Ejecutivo israelí perdió su escueta mayoría -que llegó a ser de 61 escaños cuando se formó el Ejecutivo- en medio de importantes tensiones en el seno de la coalición, lo que finalmente llevó a Bennett y a Lapid a anunciar el 20 de junio que sus esfuerzos para mantener ensamblado el Ejecutivo han sido infructuosos.
Además, el actual Gobierno asumió el poder en junio de 2021 tras doce años consecutivos de Netanyahu como primer ministro de Israel. La coalición, no obstante, está formada por ocho partidos que abarcan todo el espectro político después de un histórico acuerdo para evitar unas nuevas elecciones, después de que tuvieran que celebrarse cuatro comicios en dos años ante la incapacidad de formar mayorías. (Europa Press)