Managua.- El presidente Daniel Ortega va por su cuarto período presidencial consecutivo tras anular la competencia política, junto con su esposa, vicepresidenta y vocera, Rosario Murillo
Al menos 21 ciudadanos y opositores nicaragüenses, en nueve departamentos de Nicaragua, fueron detenidos en las horas previas a las votaciones de ayer, según el observatorio ciudadano de Urnas Abiertas.
El presidente Daniel Ortega va por su cuarto período presidencial consecutivo tras anular la competencia política, junto con su esposa, vicepresidenta y vocera, Rosario Murillo, según el observatorio ciudadano de Urnas Abiertas y el Monitoreo Azul y Blanco, que incluye denuncias de las opositoras Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) y la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), que califican la jornada de “farsa electoral”.
Entre los detenidos se han identificado a Nidia Barboza, de la Alianza Cívica, en Masaya; Muammar Vado, del partido Unamos; Esterlin Soriano González, de San Juan de Cinco Pinos, en Chinandega, y Yoel Sandino Ibarra, en Managua. Cinco de los 21 detenidos ya fueron liberados, pero otros 16 continúan detenidos.
“Esto se da en el marco de una oleada represiva de allanamientos, hostigamientos y agresiones, confirmando la ausencia de condiciones para la celebración de elecciones libres, justas y transparentes en Nicaragua”, informó el observatorio de Urnas Abiertas.
Desde la tarde del pasado viernes, en las calles de Managua, se observó mayor presencia policial y la cantidad de agentes aumentó aún más la tarde del sábado, confirmó “Confidencial”, en un recorrido por la capital. También, las viviendas de los ciudadanos críticos han sido “asediadas” y “allanadas con más frecuencia” por oficiales de la Policía Nacional, que argumentan: “evitar atentados contra la paz”.
Ayer, 4.4 millones de nicaragüenses estaban convocados a votar en una jornada que organizaciones nacionales y expertos nacionales e internacionales califican de “farsa electoral”, ante la falta de garantías mínimas para una elección libre, justa y transparente, y la nula competencia política después que Daniel Ortega y Rosario Murillo arrasaron con sus rivales políticos al encarcelar a los siete principales candidatos opositores e ilegalizar a los únicos dos partidos opositores.
Las votaciones de este domingo son las primeras tras las protestas cívicas de 2018, reprimidas violentamente por grupos paramilitares y la Policía Nacional, bajo el mando de Ortega, como jefe supremo.
“Confidencial” elaboró una guía con 12 claves para entender estas votaciones, las primeras tras la Rebelión de Abril que hace tres años y medio demandó masivamente justicia, libertad y democracia, y fue reprimida con una masacre, crímenes de lesa humanidad y la imposición de un Estado policial de facto, endurecido desde finales de mayo pasado.
CANDIDATOS PRESOS
Siete candidatos presidenciales opositores, que se perfilaban como los principales rivales de Ortega están encarcelados por el régimen: cinco -Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora y Medardo Mairena- permanecen en las celdas de “el nuevo Chipote” y dos -Cristiana Chamorro y Noel Vidaurre- están bajo arresto domiciliario. Además, dos aspirantes más -Luis Fley y María Asunción Moreno- tuvieron que exiliarse para no ser arrestados. Todos son parte de los 39 líderes opositores arrestados por el régimen desde finales de mayo pasado, en su mayoría acusados de “traición a la patria”, basados en la Ley 1055 o “Ley de la Soberanía”.
El pasado 18 de mayo, el Consejo Supremo Electoral (CSE), controlado por el gobernante Frente Sandinista, canceló la personería del Partido de Restauración Democrática (PRD) y menos de tres meses después -el seis de agosto- anuló a Ciudadanos por la Libertad (CxL).
Ambos partidos políticos eran los vehículos electorales que los principales grupos opositores -Coalición Nacional y Alianza Cívica- habían elegido para competir contra el régimen en estas elecciones. El régimen anuló también la personería jurídica del Partido Conservador (PC). (Diario Confidencial)