“Siria condena enérgicamente la visita ilegal del Jefe del Estado Mayor de Estados Unidos a una base militar ilegal estadounidense en el noreste de Siria y afirma que es una violación flagrante de su soberanía, santidad e integridad territorial”, apuntó el Ministerio de Asuntos Exteriores sirio en un comunicado.
Damasco señaló que supuestamente la visita era para evaluar la eficacia de la guerra contra el Estado Islámico, pero argumentó que “como la comunidad internacional sabe bien, el Estado Islámico es una filial de los servicios secretos estadounidense”.
Esta fuente recordó además que en los últimos días fallecieron más de 60 civiles en acciones del grupo yihadista a plena vista de las fuerzas estadounidenses invasoras presentes en el noreste de Siria.
Por otro lado denunció el apoyo estadounidense a milicias terroristas y separatistas, en referencia a las milicias kurdo-árabes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
Milley realizó su primera visita a Siria desde su nombramiento como máximo responsable militar de las Fuerzas Armadas estadounidenses y visitó a los 900 militares desplegados en el noreste del país.
También se interesó por el proceso de repatriación de los más de 60.000 familiares y milicianos del Estado Islámico, incluidos 25.000 menores de edad, retenidos en el campamento de Al Hol, según un comunicado oficial de su oficina. (Europa Press).