«Como soldado entrenado, el acusado usó sus habilidades para matar personas de una manera inhumana», ha dicho el juez principal del caso, el general de brigada Faridah Faisal, para quien el acusado no solo cometió un delito de homicidio premeditado, sino que también forzó a participar a dos subordinados, quienes están a la espera de juicio todavía, informa el diario ‘Kompas’.
«El acusado tenía la intención de eliminar a las víctimas y por lo tanto la acción equivale a homicidio premeditado», ha destacado el juez, quien ha citado Priyanto cuando se refirió a sus subordinados recordándoles que eran «soldados» y no «bebés llorones» cuando estos le pidieron llevar a las víctimas el hospital.
Según una autopsia, una de las víctimas del accidente de tráfico aún estaba viva cuando fue arrojada a un río. Según la investigación Priyanto regresaba junto a dos subordinados de una reunión del Ejército el 7 de diciembre de 2021 cuando tuvieron un accidente de tráfico en la ciudad de Bandung.
Después de golpear el coche en el que viajaban las dos víctimas, identificadas como Handi Saputra y Salsabila, Priyanto y su séquito arrojaron los cuerpos al río Serayu en Banyumas, Java Central. Cuatro días después fueron halladas y el 24 de diciembre los tres fueron arrestados. (Europa Press)